Un proyecto permitirá desenterrar uno de los henges localizados en Barbanza

Marta Gómez Regenjo
Marta Gómez RIBEIRA / LA VOZ

RIANXO

CEDIDA

La previsión es que en septiembre pueda excavarse en Burés un yacimiento de forma circular

25 may 2019 . Actualizado a las 19:53 h.

En una tierra rica en castros, mámoas y grabados rupestres de las más variadas formas como es la comarca de Barbanza, puede que aún queden enterradas en el subsuelo algunas sorpresas en forma de yacimientos prehistóricos. Por lo pronto, a la espera de una intervención arqueológica que pueda confirmarlo, se sospecha de la existencia en la zona de varios henges, unas estructuras que abundan en las islas británicas, pero prácticamente desconocidas en estas latitudes y sobre las que hay más preguntas que certezas. Esto podría cambiar una vez que se materialice un proyecto para excavar uno de esos yacimientos localizado en el municipio rianxeiro.

Los arqueólogos Víctor Barbeito y Julián Bustelo están detrás de una actuación que correrá a cargo del Grupo de Estudos para a Prehistoria do Noroeste Ibérico (GEPN), de la Universidade de Santiago de Compostela. Ellos tienen localizados tres posibles henges en el área barbanzana, dos en Rianxo y uno en Ribeira, aunque de momento, y mientras no se lleve a cabo la intervención, solo pueden suponer que se trata de ese tipo de yacimientos. Lo que es seguro es que sus características a vista de pájaro -con imágenes aéreas y el uso de una tecnología denominada Lidar que permite ver la forma de la superficie del terreno obviando edificaciones y vegetación- coinciden. Se trata de construcciones circulares, similares a los castros, pero de un tamaño mucho menor, delimitadas por un foso y un terraplén.

Poca información

La primera noticia que se tuvo de una de estas estructuras fue en el 2006, cuando se localizó casualmente durante las obras de construcción de la A-8 entre Barreiros y Reinante, con lo que la información existente sobre estos yacimientos es escasa. «Hai moi poucas intervencións feitas, e as que hai están derivadas de obra pública, e polo tanto hai poucos datos publicados ao respecto», explica Víctor Barbeito.

Precisamente, ahí radica el interés de la actuación que se va a realizar en Burés, en la parroquia rianxeira de Asados: «Pode que esteamos completamente equivocados, do que se trata é de confirmar se é o que nós pensamos que é». Si se confirman las suposiciones de los arqueólogos, podríamos estar ante un yacimiento situado cronológicamente en el segundo milenio antes de Cristo.

Finalidad ritual

Julián Bustelo insiste en que, hasta que se pongan a trabajar sobre el terreno, se mueven en el campo de la especulación, pero son optimistas en cuanto a los resultados: «Non hai certezas, pero as expectativas son boas». Tanto el yacimiento de Burés, como otro localizado en Traba, en la parroquia de O Araño, y un tercero situado en Ribeira, así como otros henges identificados por Bustelo en Rois, se encuentran muy próximos a túmulos funerarios, lo cual refuerza la teoría de que tendrían una función ritual: «Cando dedicaban un enorme esforzo a construír estas estruturas, entendemos que tiñan que ter unha finalidade. Cando comezaron a aparecer os primeiros xacementos viuse que non eran castros porque non había sinais de habitación, polo que se asociou este tipo de construcións cunha finalidade ritual».

El proyecto para excavar el henge de Burés y tratar de arrojar luz sobre este tipo de yacimientos ya está presentado en Patrimonio y, con la autorización de la comunidad de montes (propietaria del terreno) ya en la mano, solo falta el visto bueno de la Administración para ponerse a trabajar el próximo septiembre.