Cada día se decomisan 100 kilos de pescado y marisco a furtivos

Ana Gerpe Varela
A. Gerpe RIBEIRA / LA VOZ

RIANXO

CARMELA QUEIJEIRO

El Servicio de Gardacostas refuerza las inspecciones, con 2.500 desde Fisterra a Rianxo

14 feb 2019 . Actualizado a las 05:00 h.

Furtivos y vigilantes -bien sean guardas rurales contratados por las cofradías, Servizo de Gardacostas, Guardia Civil o Policía Autonómica- mantienen una batalla eterna, que en el caso barbanzano resulta especialmente intensa. Diariamente, más de 100 kilogramos de pescado o marisco son decomisados a furtivos en la franja comprendida entre Fisterra y Rianxo.

Centolla, nécora y pulpo, entre otras especies, extraídos del mar durante la época de veda o en mayor cantidad de la establecida, o bivalvo capturado por personas que carecen de autorización son retirados en aguas costeras y en tierra, ya que los controles se efectúan tanto en el mar como en vehículos.

El Servizo de Gardacostas de la Consellería do Mar, en muchas ocasiones conjuntamente con otras fuerzas de seguridad, recuperó el pasado año cerca de 39.000 kilogramos de mercancía ilegal. La mayor parte, 32.061 kilos, fueron decomisados entre el cabo Fisterra y Porto do Son, mientras que los 6.900 restantes se intervinieron en la zona comprendida entre Corrubedo y la ría de Arousa norte.

Los equipos de vigilancia no solo decomisan mercancía, sino que también sacan a los furtivos útiles empleados para capturar el producto o, incluso, para transportarlo. En este sentido, destacan el número de incautaciones que Gardacostas efectuó entre Corrubedo y Rianxo durante el pasado año, ya que se duplicaron con respecto al ejercicio anterior.

El resultado de estos operativos es fruto del trabajo de los profesionales, que llevan a cabo más de 2.500 inspecciones en el territorio marítimo barbanzano.

A la hora de valorar la importancia de retirar a los furtivos el material que emplean, guardas rurales de la cofradía de Cabo de Cruz explican: «Lo primero es sacarles el marisco, pero hacerse con rastrillos o sachos es importante porque evitas que vuelvan a faenar en lugares en los que es imposible coger el bivalvo con las manos. En ocasiones también reclamamos el apoyo de Guardia Civil o Policía Autonómica para inmovilizarles el vehículo, porque algunos vienen desde lejos y, además, así impedimos que puedan desplazarse a otras zonas».

Nuevos altercados en Cabo

Precisamente, esta semana han tenido lugar dos altercados entre vigilantes de esta cofradía y mariscadores ilegales. El último, ayer mismo. Solo entre las dos y las cinco de la tarde, los guardas rurales que estaban de servicio consiguieron recuperar unos 30 kilogramos de bivalvo.

También las concesiones de Rianxo están muy castigadas por la acción de quienes sacan producto sin autorización. La necesidad de reforzar los controles fue expuesta hace unos días a la conselleira do Mar, Rosa Quintana, por el patrón mayor, Miguel Iglesias, y la presidenta de la agrupación de mariscadores, Arancha Abuín. El dirigente de la entidad afirmaba: «Sabemos que é un proceso lento, pero sentímonos impotentes».