La vecina de Taragoña falleció ayer a los 95 años de edad
12 dic 2017 . Actualizado a las 05:00 h.Maestra de profesión, la vecina de Taragoña Carmen Otero dejó de impartir clase para fundar una familia junto a Manuel Rial. El trabajo de su esposo como en ayudantías de marina de diversos lugares de España motivó que fijase su residencia en diversos lugares, como Málaga, Marín o Ferrol. Ambos tuvieron dos hijos y cuando comenzaron a llegar los nietos, Carmen Otero se volcó con ellos, hasta el punto de que los amigos de estos pasaban a formar parte de la familia y, según afirmó ayer una de sus parientes, «la consideraban la abuela de todos».
Esta mujer volcada con su familia, abierta y siempre acogedora, a la que le encantaba cocinar y preparar los platos que más agradaban a cada uno de ellos, falleció ayer a los 95 años de edad.
Sus restos mortales recibirán hoy sepultura, a las 11.45 horas, en la iglesia parroquial del Divino Salvador de la parroquia de Taragoña.