«Con una parálisis cerebral sería difícil hacer carrera y máster sin un asistente»

ana barcala PONTEVEDRA / LA VOZPONTEVEDRA / LA VOZ PONTEVEDRA / LA VOZ

PORTO DO SON

Ramón Leiro

María Maneiro cuenta con ayuda personalizada gracias a un programa específico de Cogami

29 feb 2020 . Actualizado a las 05:00 h.

Dificultades en el momento del parto convirtieron a María Maneiro en una niña con parálisis cerebral traducida en dificultades de movilidad y el lenguaje. Una importante discapacidad que no frenó ni la creatividad ni las ganas de aprender de esta joven de 24 años nacida en Porto do Son y afincada en Pontevedra desde hace 5.

Llegó a la ciudad con su familia para cursar Publicidad y Relaciones Públicas, porque su sueño es ser creativa publicitaria. Y para estar entre las mejores profesionales de este país ahora amplia en la misma facultad pontevedresa un master de Dirección de Arte Publicitario.

Su meta no es sencilla. Pero se la facilita mucho Tamara González Acuña, una joven contratada por Cogami para desarrollar las tareas de asistente personal de María Maneiro. La ayuda a levantarse por las mañanas, la acompaña a clase, organiza sus apuntes, hace esquemas de aquellas materias que lo requieren... en definitiva, la complementa. Tanto que se han convertido en amigas.

María reconoce que integrarse en un aula con alumnos que no tienen ninguna discapacidad es complicado. Lo nota especialmente cuando tienen que trabajar en equipo. Nadie la elige para su grupo. Porque María habla con las manos, a un ritmo lento. «Cuando estoy yo no hay problema porque la traduzco; pero si no estoy María escribe en su tablet las ideas que se le ocurren y eso ralentiza la comunicación». Tamara González explica que María logra mejores resultados académicos cuando hace sus trabajos de forma individual.

Y ambas sonríen al hablar de la adaptación de exámenes. Lo hacen porque María ha conseguido que se tengan en cuenta sus limitaciones con la complicidad de algún profesor, «pero no todos estaban de acuerdo. Hubo alguno que entiende que si la titulación es igual para todos, el modo de examinarse también debe de serlo». Pero la encantadora sonrisa de María es capaz de ablandar al docente más reacio.

Tiene cosas que agradecerle a la Facultad. Por ejemplo que le hayan concedido una beca especial que permite que un compañero de clase le facilite los apuntes.

Ese es su presente. Pero ella ya sueña con su futuro. En el que se ve como creativa publicitaria diseñando campañas con impacto. Este verano ya hizo sus primeros pinitos. En Ledmon Publicidad & Marketing. Allí se integró con toda la plantilla y le encargaron el rediseño de sus tarjetas de presentación. Fue un subidón de autoestima para ella. Antes había pasado por las instalaciones de Galaxia, en Vigo. Pero las instalaciones, sin accesor, le impidieron trabajar con el departamento creativo.

«Nada de esto sería posible sin Tamara», asegura. ¿Y cómo llegó la asistenta personal a la vida de María?. Pues fue muy fácil. Ella supo del programa de Cogami a través de la asistente social municipal. Y buscó a alguien con quien tuviese afinidad, sobre todo que fuese joven. «No quería venir a la facultad todos los días con mi madre», bromea. Le hablaron de Tamara. En la primera entrevista María estuvo acompañada por su madre. Y hubo empatía desde el primer momento. «A los pocos días me llamaron de Cogami para hacerme el contrato. De eso hace ya casi cinco años y aquí estamos, las dos encantadas», apunta Tamara.