La sesión de fuegos artificiales, que por vez primera incorporaron música, fue una de las actividades estrella
13 sep 2019 . Actualizado a las 05:00 h.Los sonenses pusieron el broche a las fiestas del Carme en una larga e intensa noche. Las orquestas Claxxon y Garibaldi marcaron el arranque, pero el momento estelar llegó a la medianoche, con una sesión de fuegos artificiales que impresionó a la concurrencia. Por vez primera en Porto do Son, las tracas que llenaron de luz y color el cielo explotaron al son de la música. Luego, la diversión se trasladó a las calles de la villa. Un grupo de personas, entre los que había numerosos jóvenes, recorrieron la localidad pidiendo agua, que llegó desde balcones y ventanas. La charanga Mekánika se encargó de que la fiesta fuera redonda.