Las inversión en obras hidráulicas se prioriza y se eleva a 2,3 millones

Ana Gerpe Varela
A. Gerpe RIBEIRA / LA VOZ

PORTO DO SON

CARMELA QUEIJEIRO

Dotar de agua a núcleos sin servicio o mejorar las captaciones son las principales obras

18 may 2018 . Actualizado a las 05:00 h.

La ampliación de las redes de saneamiento se llevaba hasta la fecha buena parte del dinero de las arcas municipales y, aunque los fondos destinados a este capítulo continúan siendo importantes, las inversiones en obras hidráulicas se están priorizando, hasta el punto de que los proyectos que están en marcha supondrán un desembolso de 2,3 millones de euros, financiados con aportaciones de los concellos, Xunta y Diputación.

El prolongado período de sequía vivido el pasado año obligó a surtir de agua a núcleos como Tállara, Nebra, o Noal, entre otros, y puso en jaque a los ganaderos. Quedó claro que las traídas vecinales y los pozos particulares han dejado de garantizar el abastecimiento. A medio y largo plazo se reclama la ejecución de proyectos para que no falte el suministro y, mientras tanto, van acometiéndose nuevas infraestructuras.

En Bealo

Un ejemplo se encuentra en la zona boirense de Bealo, a la que se está dotando de agua. El conjunto de las actuaciones a desarrollar por el Concello en materia hidráulica asciende a 720.000 euros. El regidor, Juan José Dieste, explica que se colocó la red general de la traída y que se instaló el servicio en el colegio de Cespón, pero que ahora hay que instalar las conducciones para llegar a las viviendas.

También en Rianxo se llevará a cabo una actuación similar con el fin de que el agua llegue a lugares de Asados como Suigrexa y Montegrande, al igual que a la aldea de Lustres.

Una de las obras con mayor presupuesto es la que va a licitarse en Noia, con un coste de 900.000 euros. El mandatario, Santiago Freire, comenta que consiste en duplicar la capacidad de almacenamiento del depósito, porque el actual solo garantiza el abastecimiento para una jornada. Asimismo, Santiago Freire comenta que se adecuará la captación existente en el río San Xusto, a mayores de los trabajos ya efectuados tanto en este manantial como en el de Albariza.

Con cargo al Plan Único que el pleno de la Diputación aprobó el miércoles, en Mazaricos se destinarán cerca de 154.000 euros para ampliar la prestación en Cumbráns, A Xunqueira, Godón e Xesto.

Uno de los municipios con menos kilómetros de traída municipal es el de Lousame, ya que únicamente existe en el núcleo principal, donde se encuentran los principales servicios públicos. La dispersión poblacional es uno de los contratiempos con los que se encuentra el Concello que, subraya la mandataria, Teresa Villaverde, está colaborando con los colectivos vecinales, como sucede en Bexeres, en Lesende, «porque quedan sen auga». Asimismo, indica que «este ano imos facer un convenio cos residentes en Xestoso porque fixeron una nova captación e vanse renovar as arquetas».

También en Porto do Son se realizaron trabajos y hay otros pendientes. La intención es llevar la traída a lugares de O Pozo e Eiravedra, en Portosín, así como a las aldeas de Nebra o a Casanela, en Noal. El alcalde, Luis Oujo, señala que la inversión prevista a corto plazo es de 300.000 euros. Se trata de una cantidad similar a la que se invertirá en Ribeira, pero en este caso en la sustitución de viejas conducciones que suelen romperse con frecuencia.

Las demandas por parte de los vecinos que carecen de traída municipal se han incrementado

 Durante los últimos años muchos vecinos han visto como se secaban sus pozos artesanales. Ciudadanos que hasta ahora consideraban que podían prescindir de la traída de agua municipal se dan cuenta de que el abastecimiento no está garantizado. Los regidores comentan que las demandas ciudadanas para disponer de esta prestación se han incrementado.

Así lo explica el boirense Juan José Dieste, quien también recalca que la dotación de suministro a Bealo era uno de los compromisos asumidos por su partido. Teresa Villaverde afirma que el pasado verano, cuando surgieron los problemas en Tállara, los residentes reclamaron la adopción de medidas, ya que cuentan con una red gestionada por ellos.

Entonces se planteó la opción de colocar contadores para llevar un control más exhaustivo sobre el consumo. Llegaron las lluvias y parece que la propuesta quedó aparcada, aunque Villaverde indica que su objetivo es que continúe adelante.