Se ha comenzado a descargar paja para consolidar el suelo en las zonas quemadas
22 sep 2016 . Actualizado a las 05:00 h.Con el arranque se la semana, se inició también la actividad en los montes de Porto do Son afectados por los incendios del pasado agosto para evitar que los daños provocados por las llamas se agraven en los próximos meses con la llegada del mal tiempo. De hecho, aunque se está actuando en distintos ámbitos, la prioridad en el comienzo de los trabajos es evitar los arrastres de la ceniza, así como servir alimento al ganado mostrenco después de que el fuego arrasase los pastos en los que comía.
En esta línea, lo primero que se ha hecho ha sido descargar varios remolques de paja en Xuño y repartirla por distintos puntos, prestando especial atención a aquellas zonas más degradadas a causa de los incendios, sobre las que se extenderá la hierba seca para consolidar el suelo y evitar los arrastres y que la ceniza llegue a los manantiales.
La paja también tiene como destinatarias a las reses que viven en el monte y que han visto como su alimento mermaba a causa del fuego. Siguiendo las indicaciones de los ganaderos, también se ha empezado a distribuir en puntos concretos en los que se almacenará como sustento para los animales.
Cierres pendientes
En relación con el ganado, está previsto habilitar un pastizal y construir varios cierres en los que concentrar a las vacas mostrencas para garantizar que tengan agua y alimento, pero estos trabajos todavía no han comenzado. Según explicaba ayer el presidente de la entidad que aglutina a los ganaderos, los técnicos trabajan en el monte evaluando el terreno para determinar dónde y cómo ejecutar esos cierres.
Un aspecto en el que sí se está trabajando ya es en la reparación de pistas forestales en mal estado. Una de las primeras en las que se ha actuado está próxima a uno de los puntos elegido para almacenar la paja destinada a los animales, pero está previsto continuar con el arreglo de los caminos en los próximos días. De hecho, hoy mismo se dará continuidad a esta tarea, al tiempo que comenzarán las actuaciones para reparar los destrozos causados en el monte por la maquinaria utilizada para abrir cortafuegos y frenar el avance de las llamas. En este sentido, está previsto que las buldócer regresen hoy a la zona incendiada para actuar en esos puntos.
Por otra parte, al arreglo de las pistas y caminos se sumarán en las próximas horas los trabajos de limpieza de cunetas y tajeas con el fin de evitar que se atasquen y que con las lluvias se produzcan desbordamientos.
Otra cuestión pendiente y que, según indicaron los comuneros, urge acometer es la retirada de la madera quemada. En relación con esto, las entidades que gestionan el terreno en mano común indican que antes de llevar a cabo esta tarea es preciso coordinarse con los técnicos de Medio Rural que trabajan en la zona.
«Imos agardar»
En este sentido, el presidente de la comunidad de montes de Xuño, José Manuel Silva, comentó que ya se han llevado a cabo actuaciones de limpieza en zonas de frondosas que no resultaron afectadas por el fuego, pero que, en lo que respecta a otro tipo de intervenciones, «imos agardar a ver que van facendo eles para logo acometer os traballos de xeito organizado. Hai que retirar a madeira, pero primeiro temos que ver en que zonas se pode triturar, como facelo... Hai que coordinarse».
Una decena de cuadrillas contraincendios seguirán operativas en octubre
Aunque el viernes de la próxima semana se da por finalizada la temporada de peligro alto de incendios decretada por la Xunta, el grueso de las cuadrillas contratadas por los concellos de la zona continuarán al pie del cañón con octubre ya iniciado. De hecho, son una decena las brigadas activas en este momento y la mayoría continuarán operativas hasta finales del mes que viene realizando trabajos de desbroce.
Ribeira y Muros fueron los ayuntamientos que antes contrataron a los operarios y serán también los primeros en decirles adiós al expirar los tres meses de contrato estipulados para los integrantes de las brigadas contraincendios. Con todo, seguirán trabajando hasta principios de octubre. Hay un segundo grupo de cuadrillas que iniciaron su actividad a principios de agosto y, por lo tanto, permanecerán activas hasta finales de octubre o principios de noviembre. Es el caso de los equipos de extinción de Boiro, Rianxo y Lousame. Y, por último, está el caso de las brigadas de A Pobra y Noia, las últimas en incorporarse al trabajo y, por tanto, las últimas en acabar. Estarán activas hasta comienzos de diciembre.