Un emprendedor que rentabiliza el Outes más rural como trampolín turístico

aldara sUÁREZ / A. G. RIBEIRA / LA VOZ

OUTES

Laura Martelo

Tras quedarse en paro, Antonio Rodríguez vio en el auge de la realización de rutas una oportunidad de negocio que desarrolló y pondrá en marcha esta semana

06 jul 2021 . Actualizado a las 05:00 h.

El auge del turismo rural ha creado un nicho de mercado perfecto para que Antonio Rodríguez pusiera en marcha su proyecto empresarial. El emprendedor ha visto una oportunidad única para mostrar el patrimonio cultural, tanto material como inmaterial de Outes, mediante la realización de unos paseos interpretados por la zona.

La idea comenzó a gestarse tiempo atrás, cuando el joven outiense, que trabajaba en una empresa constructora dedicada al sector del turismo en A Coruña, se quedó sin empleo. De regreso en su pueblo natal y en paro, Antonio Rodríguez comenzó a hacer deporte por los parajes naturales, encontrándose con sitios nuevos, caminos parcialmente ocultos y paisajes únicos.

El primer paso fue la creación de una página en Facebook para compartir sus experiencias: «Se eu aínda estou agora descubrindo isto, haberá xente que tampouco o coñeza», pensó. Rápidamente encontró el apoyo de muchas personas, interesadas por sus experiencias y por los lugares que mostraba.

Paralelamente, Antonio Rodríguez emprendió una labor de documentación para incluir diversa información en las rutas turísticas, otorgándoles más sentido y vínculo emocional con el patrimonio. Esto llamó la atención del propio Ayuntamiento de Outes, que quiso colaborar con el emprendedor en el diseño de unos recorridos culturales.

Inicialmente, la idea nació con la intención de ser un pasatiempo y un proyecto de ocio temporal, pero al ver el potencial comercial que tenía decidió aprovechar esa oportunidad.

Uno de los principales atractivos de estas rutas es la forma en la que entiende Antonio Rodríguez esta actividad económica: «Quero darlle unha volta a todo, para poder comprender o global dende o local e así centrarnos no que temos». Considera que en un futuro podrían ampliarse a municipios limítrofes para impulsar el turismo en otras localidades.

Poner en valor y cuidar el entorno es su principal objetivo, intentando reforzar la identidad cultural y patrimonial, siempre respetando el medio natural.

Los itinerarios ofertados no serán modificados en función de las condiciones meteorológicas, pese a que considera que la afluencia de participantes puede resentirse. Asegura que «a experiencia vai variar dependendo da época do ano na que as realices, con encantos diferentes».

Las rutas turísticas estarán divididas en dos apartados que complementarán la experiencia. La interpretada, enfocada a la temporada alta, ofrecerá a los usuarios un recorrido guiado de unos diez kilómetros en donde se explicarán los elementos patrimoniales que se encuentren por el camino. Las líneas complementarias estarán ideadas para realizarse en temporada baja en colaboración con diversos agentes del territorio, como alojamientos turísticos, colegios o asociaciones.

El proyecto será lanzado al público el jueves y contará con una web y visualización en redes sociales. Las reservas se podrán realizar a través de diversas plataformas.

Las rutas serán tanto fijadas por el organizador como en jornadas flexibles, a demanda de los usuarios. Los grupos tendrán un máximo de 20 personas, con la intención de poder dar una experiencia más completa y personalizada. Inicialmente no habrá servicio de transporte hasta los lugares de salida, pero en un futuro se baraja implantarlo.