Eduardo Fraga falleció ayer a los 70 años
26 sep 2019 . Actualizado a las 05:00 h.Por repentina e inesperada, la muerte de Eduardo Fraga cayó como un mazado ayer en Noia. No solo porque era una persona muy conocida y apreciada, sino porque en los últimos años consiguió que el club de jubilados resurgiese para colocarlo en un puesto relevante en el asociacionismo noiés.
Aunque dedicó buena parte de su vida a surcar los mares, en los últimos años de su trayectoria laboral se puso al frente de diversos negocios relacionados con la alimentación y tuvo una carnicería en el Campo de Noia, con lo que eran pocos en la villa los que no lo conocían. Ya retirado, llevó una vida tranquila, hasta que hace algo más de tres años cogió las riendas del club de jubilados. Empezó a programar más actividades y viajes, y con ellos consiguió relanzar la entidad sumando nuevos socios.
Disfrutaba mucho con su trabajo en el club. Ya estaba preparando la convocatoria de elecciones y pensaba presentar su candidatura para revalidar la presidencia.