Las rulas de Ribeira, Noia, Portosín y Muros, entre las punteras de Galicia

Ana Gerpe Varela
a. Gerpe RIBEIRA / LA VOZ

MUROS

MARCOS CREO

El volumen de su movimiento económico ronda los 77 millones de euros

19 jun 2019 . Actualizado a las 05:00 h.

Los sectores pesquero y marisquero constituyen el principal activo de la economía barbanzana por la cantidad de puestos de trabajo directos e indirectos que se generan. La comarca es un referente y los datos de facturación y venta de producto fresco así lo demuestran, situando a cuatro de las lonjas de la comarca entre las 13 primeras de Galicia. En concreto, se trata de las rulas de Ribeira, Noia, Portosín y Muros.

Estas cuatro instalaciones tuvieron, el pasado ejercicio, un movimiento económico próximo a los 77 millones de euros, lo que supone un 17 % del generado por las veinte de mayor facturación. Cabe señalar, además, que Ribeira y Noia mejoraron sus resultados. El aumento del valor medio de la mercancía motivó que pese a descender el número de kilos estos se pagaran más.

En el caso ribeirense, a los gerentes no les cabe duda de que la introducción de la marca PescadeRías ha permitido la revalorización de la materia prima, motivando que cada vez sean más los establecimientos de restauración que acuden a la rula en busca de un producto por el que están dispuestos a pujar.

Todavía mejores son los datos sobre comercialización de mercancía, ya que rondó los 44 millones de kilos. Este registro supone el 20 % de Galicia.

Un caso paradigmático es el de la rula de Noia, con 2,6 millones de kilos comercializados. El secretario de la cofradía, Adelino Freire, subrayaba ayer que en la instalación «unicamente se vende materia prima sacada das nosas concesións. Aquí non veñen profesionais doutros lugares».

Sobre los buenos resultados, Freire indica que están muy vinculados al trabajo que se efectúa en las autorizaciones: «Temos produto, pero tamén facemos un bo coidado do medio mariño e mantemos a vixilancia».

Tirón marisquero muradano

El patrón mayor de Muros, Daniel Formoso, recalca el tirón experimentado por el marisqueo: «Subimos bastante. Aumentaron a produción e os prezos».

Sin embargo, Formoso subraya: «Moitas veces é preferible coller menos e que o valor aumente. O ideal é axustar a oferta á demanda, porque esa é a forma de protexer o recurso e incrementar a súa cotización. Non é sinxelo».

El dirigente muradano comenta que la lonja atrae a los compradores porque «temos un pouco de todo». Capturas del arrastre como jurel o xarda constituyen su principal reclamo, pero tampoco faltan otras como el lenguado. Asimismo, especies que han alcanzado un gran auge y un considerable aumento de precio, como el pulpo, también están presentes, al igual que mariscos con una fuerte demanda.

Explica Daniel Formoso que la lonja, además, suministra producto para algunas cadenas de distribución que operan a nivel nacional, lo que hace que haya un volumen de venta mayor.

El movimiento de la rula de Muros se situó el pasado ejercicio en la franja de los seis millones y, en la actualidad, ronda los dos. El precio medio de las especies subastadas es alto, cerca de los cuatro euros, casi el doble que el alcanzado hasta fecha en Ribeira.

La otra lonja de referencia es la de Portosín que, además, aglutina a la flota de cerco más importante de Galicia. Con los límites de capturas impuestos a la sardina, las principales especies comercializadas son el jurel y el cabalón: «É co que defendemos os barcos», afirma el sector.