El Oleiros empató en casa y se jugará el ascenso en casa del Peleteiro

Ribeira

MUROS

CARMELA QUEIJEIRO

El Volantes de Baño comienza a asomar su cabeza en Primera Galicia tras vencer al Cacheiras por 5-0

21 may 2019 . Actualizado a las 10:58 h.

Quizás no fue el mejor partido del Oleiros, pero los de A Trinidade siguen con vida en la fase de ascenso hacia Segunda Galicia. Contra un Peleteiro que fue de más a menos, los ribeirenses lograron firmar el 2-2 en el último segundo, empate que obliga a decidir el desenlace en casa de los visitantes.

Dotados de buen fútbol, pausa y creando espacios a través del balón, el Peleteiro se adelantó en el marcador con el 0-1 de Ángel Torrente. No terminó ahí el festín de los capitalinos que, a pesar de contar con múltiples ocasiones para firmar un segundo gol, acabaron estrellándose con un Juan fuera de serie.

Aupado por su portero, el Oleiros tomó el ritmo al encuentro. Aunque no brilló en el apartado futbolístico, sí lo hizo en el físico, imprimiendo carácter y corazón a cada balón. Fue así que Jaime Carreira, en el minuto 43, hizo el empate. El guion se mantuvo en el segundo tiempo. A pesar de que el fútbol se volvió más tosco, el Peleteiro se adelantó de nuevo con un gol de Daniel Martínez. No cejó en su empeño el Oleiros, que siguió creyendo hasta el último suspiro, momento en que Carreira dio vida a su bloque firmando el definitivo 2-2.

A Primera

El Volantes de Baño comienza a asomar su cabeza en Primera Galicia. Los muradanos, que se encuentran disputando la liguilla de ascenso a dicha división, dieron un golpe encima de la mesa en el Eleuterio Balayo, donde golearon al Cacheiras por 5-0.

Los de Sil dejaron el encuentro sentenciado en la primera media hora. Alejandro, Alberto y Ángel Caamaño firmaron el 3-0 en un suspiro. Sería Caamaño quien anotase el 4-0 en la segunda mitad, cerrando Fernando el marcador en el descuento con el 5-0.

Los de Muros, que visitan al Villestro este fin de semana, tienen la promoción a un paso, si logran sumar la victoria. Después de una temporada para enmarcar, solo un descalabro impedirá que suban de categoría.