Cerca de 2.500 horas de ayuda en el hogar quedan sin usar cada mes

Ana Lorenzo Fernández
Ana Lorenzo RIBEIRA / LA VOZ

MUROS

SANDRA ALONSO

La lentitud de la tramitación y la renuncia de algunos usuarios explican la situación

20 feb 2019 . Actualizado a las 14:18 h.

El envejecimiento de la población de la comarca y que cada vez hay más personas que viven solas hace que el Servizo de Axuda no Fogar (SAF) se haya convertido en una herramienta muy útil para poder atender a esos barbanzanos cada vez más dependientes. Sin embargo, y a pesar de que a finales del año pasado la Consellería de Política Social incrementó el programa en los 11 concellos de la zona en más de 66.550 horas, todavía falta mucho para que el mecanismo esté totalmente engrasado y se puedan cubrir todas las demandas. De hecho, los problemas en la tramitación y la renuncia de muchos usuarios porque la adjudicación de la plaza llega demasiado tarde ?en algunos casos incluso cuando han fallecido? provoca que cada mes queden sin gastar cerca de 2.500 horas, lo que traducido a un año rondaría las 30.000.

El personal de los departamentos de Servizos Sociais de los concellos es el encargado de tramitar todas las solicitudes, sin embargo, siempre se encuentran con el mismo escollo: las valoraciones que tienen que hacer los profesionales de la Xunta para poder sumarse al SAF están tardando cerca de un año. De hecho, casi todos los usuarios que pidieron entrar en el programa durante el 2018 todavía no disponen de horas porque no han recibido el visto bueno de los técnicos de Política Social.

La consecuencia directa de esta situación es que un gran número de barbanzanos que en la actualidad tienen mucha necesidad no pueden contar con esta ayuda de forma inmediata y deben esperar. «Moitos cando escoitan que hai que agardar tanto xa nin a solicitan», explican desde el área de Servizos Sociais de Muros, donde confiesan que tienen a mucha gente en lista de espera pendiente de la valoración de la Xunta. Esto explica que durante el mes pasado quedasen sin utilizar 730 horas ya asignadas. «Hai que axilizar máis as valoracións para que poidamos atender a máis xente e tamén contratar ás persoas que as axudan», destacaron.

Todas cubiertas

La situación en Lousame es justo la contraria, puesto que el mes pasado lograron repartir prácticamente todas la horas del SAF con las que contaban, y solamente quedaban dos disponibles, «que penso que poderán cubrirse o mércores (por hoy)».

A pesar de este buen balance, también reconocieron que todavía tienen muchos usuarios en lista de espera para recibir la valoración positiva de Política Social y poder darse de alta en este servicio de ayuda en el hogar.

Los solicitantes son mayores de 70 años que viven solos o con un familiar dependiente

La gran mayoría de los usuarios del Servizo de Axuda no Fogar (SAF) son personas mayores de 70 años que viven solas, acompañadas de un familiar de avanzada edad o de un hijo con dependencia. Por este motivo, casi el 90 % de los demandantes solicitan el máximo de horas que establece la Consellería de Política Social, que son 70 al mes. «Os poucos que non piden todas, ao final acaban reclamando unha ampliación porque o seu estado de saúde deteriorouse e precisan más axuda», apuntaron desde Servizos Sociais de Lousame.

Otro tema a tener en cuenta es que, aunque el programa está financiado en gran medida por la Xunta, los concellos y los propios usuarios también tienen que poner de su bolsillo para poder beneficiarse de este servicio. De hecho, el coste de una hora del SAF ronda los 14 euros, de los que Política Social abona cerca de diez, mientras que los ayuntamientos aportan 2,5 euros y el usuario 1,65. De esta forma, si un barbanzano solicita 70 horas al mes, tiene que desembolsar algo más de 115 euros.