El material utilizado para cubrir las grietas que presentaba el asfalto es muy resbaladizo, sobre todo con la lluvia
16 nov 2017 . Actualizado a las 05:00 h.La carretera comarcal AC-400, que une Muros con Santa Comba, presenta desde hace semanas unas manchas negruzcas sobre el firme que, según denuncian muchos conductores habituales de esta vía, han ocasionado que varios vehículos patinen, e incluso acaben saliéndose de la vía si la carretera está mojada. Al parecer, el material utilizado para rellenar las grietas que aparecieron sobre el asfalto, similar a un producto sintético tratado con calor, es el culpable de que las ruedas de los turismos no consigan adherirse a la calzada y acaben deslizándose.
Esta sustancia se imprimió sobre la carretera hace cerca de un mes, en un tramo de tres kilómetros comprendido entre Paxareiras y Suevos, y sin que se colocase ninguna indicación de advertencia sobre su peligrosidad, según denunciaron varios conductores. De hecho, después de que se produjeran varias salidas de carretera, el pasado lunes se procedió a instalar señales con elementos luminosos que informan sobre la realización de obras en el vial, al mismo tiempo que se han tapado algunos indicadores de velocidad.
Restos de chapapote
Vecinos de Paxareiras y Suevos criticaron la actuación de la empresa encargada de dotar a la carretera de una nueva capa asfáltica. «Tiraron na estrada ese chapapote que non lles servía, e agora iso está a provocar accidentes», señalaron. Los mismos residentes en la zona también reconocieron ayer que «ata que sucederon varios sinistros ninguén puxo sinal ningunha, e agora acordáronse de colocar algunha indicación de perigo».
No obstante, las quejas sobre el servicio de carreteras de la Xunta va en aumento, al considerar una total negligencia de los responsables autonómicos el no poner remedio a esta anomalía, bien acelerando la conclusión de las obras de reposición del asfalto, si así estaba programado, o retirando el material vertido sobre la carretera. En cualquier caso, parece insuficiente la información de peligrosidad que se dispuso esta última semana para este tramo del vial.
La Consellería de Infraestruturas recuerda que los trabajos todavía no han finalizado
Desde la Consellería de Infraestruturas, responsable de dicho vial, reconocieron ayer que en esta zona de la carretera AC-400 se está ejecutando una reparación del firme, «que está sin finalizar, por lo que en estos momentos la señalización de la calzada es la de obras, y algunos de los indicadores fijos están tapados».
También explicaron que la actuación se ha llevado a cabo en varias fases. Así, en un primer momento se procedió a realizar un sellado de las grietas que había en el asfalto, «y se ha iniciado la extensión de árido para mejorar la resistencia al deslizamiento», apuntaron desde este departamento autonómico.
Al mismo tiempo, quisieron volver a hacer hincapié en que los trabajos aún «están sin finalizar», por lo que es muy importante que los conductores que circulen por la carretera extremen las precauciones en la zona hasta que concluyan definitivamente las obras.