Ribeira, Boiro, Carnota, Mazaricos y Outes tienen el IBI más bajo

Ana Gerpe Varela
A. Gerpe RIBEIRA / LA VOZ

MAZARICOS

MARCOS CREO

Rianxo y Noia aplican el gravamen más alto en el impuesto de contribución urbana

05 dic 2021 . Actualizado a las 05:00 h.

El denominado popularmente como impuesto de la contribución constituye la principal fuente de financiación de las arcas municipales. Según las estimaciones, se calcula que, de media, uno de cada tres euros del capítulo de ingresos de los concellos procede del pago del IBI. En el caso de Barbanza reporta 18,6 millones, de los que 17,5 corresponden al pago por inmuebles de naturaleza urbana. Las revisiones de oficio impulsadas por Hacienda en los últimos años han supuesto un varapalo económico para los ciudadanos, ya que una buena parte han visto considerablemente incrementado el importe anual a desembolsar. Pese a tratarse de un tributo esencial para las cuentas locales, la única competencia de los concellos es el tipo impositivo que aplican al valor catastral y, precisamente, este aspecto genera confrontación política en numerosas ocasiones.

El Gobierno central establece un tipo impositivo mínimo a aplicar, que en el caso de los inmuebles urbanos está en el 0,4. Precisamente, en esta franja se sitúan los ayuntamientos de Boiro, Ribeira, Carnota, Outes y Mazaricos, que son los que menos cobran al haber fijado el gravamen más bajo. Cabe señalar que actualmente ninguna Administración local llega al coeficiente máximo, que es del 0,60.

En el polo opuesto se sitúa Rianxo, con un porcentaje del 0,54 % y Noia, con el 0,51 %. En el caso rianxeiro se han aplicado rebajas en el último lustro, dado que en el 2017 el gravamen era del 0,57 %, y el alcalde, Adolfo Muíños, no descarta otra reducción en próximos ejercicios. Explica el mandatario que «cada ano facemos un análise económico e gustaríame que puidéramos falar dunha rebaixa ao 0,53 % de cara ao 2023. Dependerá un pouco da evolución dos ingresos».

Actualización en marcha

Muíños precisa que está en marcha en el municipio un proceso de actualización, realizado por el Catastro, que finaliza en el 2022: «Intentaremos mitigar o que pode supoñer. O idóneo sería un novo modelo de financiamento para as arcas locais».

Incluso, el regidor habla de la posibilidad de establecer bonificaciones por la instalación de energía fotovoltaica.

En cuanto a Noia, Santiago Freire subraya que, por ahora, no está prevista la reducción del tipo impositivo del IBI: «Aplicamos bonificacións noutros apartados e co cambio de normativa sobre a plusvalía os ingresos van verse mermados».

Al descenso de fondos que reciben los ayuntamientos también hace referencia su homóloga de Muros, Inés Monteagudo, quien subraya que una reducción pondría en peligro el equilibrio de las arcas locales. En este aspecto, comenta que «las previsiones apuntan que recibiremos menos dinero de los tributos del Estado y también está en juego la recepción de algunas subvenciones que ayudan a sufragar determinados servicios».

Son tres los concellos cuyo coeficiente está en la parte media, el 0,50 %, entre los que figura Porto do Son. Su mandatario, Luis Oujo, comenta que no hay previsión de una reducción. Señala que otros tributos, como el de vehículos, están en el nivel más bajo.

 

El tipo impositivo fijado en la comarca está en la franja de concellos colindantes

El tipo impositivo aplicado al IBI en la comarca se sitúa en la misma franja que el de otros ayuntamientos próximos. Así, Padrón aplica el mínimo en la contribución urbana, el 0,40 %, al igual que Carballo. Santa Comba tiene un gravamen dos puntos por encima, situándose en el 0, 42 %, y Cambados llega al 0,46.

Llama la atención que el establecido en Santiago o Vilagarcía sea igual que el de Noia. Por su parte, concellos como Cee lo tienen por encima del de la vecina Carnota y Negreira, también 10 puntos por encima del establecido en Mazaricos.

El rústico

En cuanto al IBI para las propiedades de carácter rústico, resulta significativo que Outes o Carnota, que cobran el mínimo en el urbano tengan en este un gravamen del 0,65 %. También Noia se sitúa entre las franjas más elevadas, con un 0,63 %.

Por el contrario, el mínimo es el establecido en Muros y Mazaricos, el 0,3 %.

SÁLVORA

Punto de mira

Las revisiones de oficio realizadas por el Catastro en la comarca durante los últimos años han situado al IBI en el punto de mira. Es un impuesto que con una gran repercusión para las economías familiares y el hecho de ver incrementado el importe a desembolsar a fin de año tiene especial incidencia. El gravamen que aplican los concellos ha sido objeto de debate en muchas ocasiones y no todas las propuestas para reducirlo se vieron materializadas, en parte por los problemas financieros de los concellos.