La organización de la fiesta gastronómica de Mazaricos cifra en más de dos mil las raciones servidas
02 mar 2020 . Actualizado a las 05:00 h.Los bolos do pote siguen teniendo tirón. Porque, aunque el día no invitaba a salir de fiesta, Mazaricos volvió a llenarse hasta los topes de gente dispuesta a degustar este plato, imprescindible en las mesas de antaño.
Aunque resulta difícil cuantificar el número de raciones de bolo consumidas, pues también se sirvieron como pinchos durante todo el fin de semana, desde la organización calculan que superó ampliamente los dos millares. De hecho, solo en la degustación gratuita efectuada en la carpa situada en el Campo da Feira se despacharon más de 500 bolos acompañados de sus correspondientes guarniciones a base de oreja y chorizo.
Como viene siendo costumbre, fueron los integrantes de las asociaciones de Amas de Casa de Mazaricos y de vecinos Monte Picoto los que corrieron con el peso de esta exaltación gastronómica que, según reconocen desde ambos colectivos, superó las expectativas iniciales de asistencia.
Los restaurantes
Lo corroboran desde algunos de los establecimientos hosteleros que participaron en la edición de este año -fueron once en total- y que se incluso se vieron obligados a realizar varios turnos de comida o a colocar mesas supletorias para que nadie se quedase sin probar el producto.
De forma paralela a la fiesta tuvo lugar una concentración de una veintena de coches Mini llegados desde diferentes puntos de Galicia y cuyos conductores aprovecharon para dar un recorrido por el municipio.
También hubo pasacalles, diversas actuaciones de música tradicional y un desfile de los Entroideiros de Arcos que hizo las delicias de los asistentes.