El Mazaricos ganó la Liga da Costa con mucha niebla de por medio

Melissa Rodríguez
melissa rodríguez CARBALLO / LA VOZ

MAZARICOS

JORGE PARRI

El técnico del Corme asegura que, por momentos, no veía la banda de enfrente

16 abr 2019 . Actualizado a las 05:00 h.

Este año, el título de la Liga da Costa trae cola. El Mazaricos es el campeón matemático a falta de dos jornadas y, por consecuencia, asciende directamente a Primera Autonómica, tras imponerse este domingo al Corme, segundo clasificado, por la mínima en el campo Peña do Ouro (3-2). No obstante, la resaca del partido todavía dura a día de hoy.

JORGE PARRI

Una niebla muy espesa retrasó el inicio del duelo casi media hora. Durante ese mismo período, ya con el balón en juego, llegó a desaparecer, para luego ser una cortina de humo por momentos. «Ás veces non vía que xogador estaba na outra banda. E o público xa nada. Incluso falando co noso porteiro me dicía que non vía o balón [blanco] ata que estaba a escasos metros», comentó el entrenador del Corme, José Ángel Pérez que, aún así, acepta el resultado, «xusto», comentó, e incluso felicita al rival por el campeonato. Simplemente, opina, que no se debería haber jugado así.

Diferente visión tiene el técnico del Mazaricos, Roberto Amoedo: «Si que por momentos a néboa estivo moi baixa, pero un partido como este había que xogalo no día».

Más allá de la polémica, el Corme fue mejor en la primera parte. Muestra de ello fue que Lucas Rial abrió el marcador. Pero tras la reanudación, el Mazaricos salió más enchufado y con su máximo goleador, Ismael Pedrosa, le dio la vuelta al marcador en 25 minutos (3-1). Los visitantes se recompusieron en la recta final y Alejo no falló a su cita con el gol (3-2). Durante los 90 minutos, ambos conjuntos tuvieron más ocasiones, como un tiro al palo de los locales o un buen disparo de Alejo que el portero paró.

Con este resultado, el Mazaricos puso fin a una sequía de títulos ligueros desde el año 1994, luego de estar muy cerca en los últimos años. Y todo, bajo la dirección de Roberto Amoedo, un jugador de Redondela que llegó hace dos campañas al Mazaricos, afrontando una doble labor: la del campo, donde es un experto tras lograr sendos ascensos con el Negreira, el Estradense o el Boiro, y la del banquillo, su primer contacto: «Nunca pensei en ser adestrador. De feito, sigo pensando como xogador», dijo ayer, a lo que añadió: «Alégrome, sobre todo, polos xogadores que levaban moitos anos no club loitando polo título».

Respecto al autor de los tres goles, Ismael Pedrosa, comentó: «É un coñecido da Serra de Outes que chegou ó conxunto esta tempada e aportounos moito, xa non só cos goles, senón no xogo».

Por su parte, el Corme, que solo tiene una ventaja de un punto sobre el Volantes de Baño, aspira a luchar por terminar la liga en la segunda posición. Así lo confirmó el míster ayer, que, asimismo, tuvo unas palabras para la afición del equipo: «Estivo de doce o domingo. Desprazáronse máis de 200 persoas [hubo unas 500 en total], cando o día non acompañaba, con orballo».