La caldera de Vilas aúpa al Unión a un triunfo épico ante el Boiro (1-0)

Christopher Rodríguez
christopher rodríguez RIBEIRA / LA VOZ

BOIRO

Un zapatazo desde la frontal de Nieto dio la victoria a los de Asados

12 mar 2023 . Actualizado a las 21:42 h.

Fe. Esta es la palabra que mejor define lo vivido esta tarde en el abarrotado campo de Vilas, donde se vivió un intenso derbi barbanzano en el que el Unión de Asados salió vencedor frente al Boiro (1-0), pese a las dificultades, la clasificación y la entidad del rival. La diferencia de puntos en la tabla entre ambos conjuntos no fue tangible en el terreno de juego, donde, como buen derbi, la igualdad y la intensidad primaron en todo momento.

El encuentro comenzó con el tramo de tanteo habitual en este tipo de choques. El Boiro, siempre protagonista con el balón gracias a una portentosa actuación de Suso en la medular, fue el primero en buscar la portería mediante un disparo de Pedro Beda cerca del cuarto de hora que se fue rozando la cruceta.

El Unión, sin arrugarse en ningún momento, no tardó en responder con un disparo desde el área pequeña que fue repelido bajo palos por la defensa boirista cuando Vilas ya celebraba el tanto, pero la grada tuvo que esperar.

El éxtasis

El descanso llegó con el 0-0 imperando en el luminoso, en una primera parte en el que el medio del campo fue el protagonista. A la vuelta del túnel de vestuarios el dominio del Boiro se acrecentó, desembocando en una acción de muchos quilates de Grégor desbaratada por Eloy, que detuvo una vaselina del boirista.

Con Vilas como jugador número 12 el Unión desató el éxtasis en la grada en el minuto 58 gracias a un zapatazo de Sergio Nieto desde la frontal del área. El rianxeiro supo aprovechar una segunda jugada tras un saque de banda para perforar las mallas boiristas, en una acción en la que nada pudo hacer Mario Barreiro.

El gol de los locales volcó aún más si cabe al Boiro hacia la meta rival. Comandados, de nuevo, por un Suso en estado de gracia, los de Anxo Casalderrey buscaron el empate con ahínco y cerca estuvieron de conseguirlo. Una jugada embarullada en el área del Unión finalizó con dos tiros al poste y con Pedro Beda expulsado por protestar al colegiado.

Sin tiempo para más, la resistencia rianxeira dio sus frutos quedándose con el triunfo y, sobre todo, con la esperanza de la permanencia en el horizonte.