Activado el nivel 2 de alerta por la proximidad del fuego a Piñeiro
05 ago 2022 . Actualizado a las 23:02 h.Desde que se originaron pasadas las cuatro de la tarde de ayer, las llamas han arrasado ya más de 400 hectáreas de monte en Boiro, y las fuertes rachas de viento que soplan del nordeste están complicando sobremanera las tareas de extinción. Tanto, que a media tarde se ha solicitado da declaración del nivel de alerta 2 en la zona por la proximidad de las llamas a las viviendas del núcleo de Piñeiro.
En el operativo de extinción activado en la tarde del jueves participa un amplio despliegue de medios terrestres y aéreos. Según el último recuento facilitado por la Consellería de Medio Rural, desde que se inició, se han sumado al dispositivo tres técnicos, 25 agentes forestales, 40 brigadas, 25 motobombas, cuatro palas, una unidad técnica de apoyo, 12 aviones y siete helicópteros.
Sin embargo, el fuego, que se originó el jueves a las 16.12 horas en la zona de Cubelo, en la parroquia boirense de Cures, sigue fuera de control. De hecho, los medios desplegados en la zona no dan abasto para hacer frente a las numerosas reproducciones que se están registrando avivadas por el viento. «Está prendendo en todos os lados á vez», afirmaban desde uno de los equipos que trabajan en la extinción del fuego. A ello se suma un nuevo foco declarado esta mañana y que con el paso de las horas se ha ido complicando hasta poner en peligro las viviendas de la aldea de Piñeiro. El alcalde de Boiro, José Ramón Romero, señalaba que la situación era muy delicada, de ahí que se activase el nivel 2.
Por su parte, en la zona cero del incendio, en Cubelo, donde a media mañana la situación parecía tranquila, las llamas se reavivaron e impedían el acceso al núcleo de A Figueira, que ya en la jornada del jueves se vio amenazado por el fuego. Mosquete es otra de las aldeas donde los vecinos pasaron la noche en vela por la proximidad del frente, que este mediodía se reprodujo cercando una vivienda. Su dueña y su nieta relatan que los medios de extinción se habían marchado a primera hora de la mañana dando por controlada la situación, pero apenas unas horas más tarde tuvieron que volver: «Pensamos que non ía chegar á casa, pero cando nos demos conta xa vimos unhas chamas tremendas».
Pomar do Río, Comoxo, Montaña y Montañó son otros de los núcleos que vieron cerca las llamas de un incendio con más de cinco kilómetros de frente y que, por ahora, está lejos de estar controlado.