Chino Benavídez confía en competir de «igual a igual» contra el Teruel

LA VOZ RIBEIRA / LA VOZ

BOIRO

CARMELA QUEIJEIRO

Pablo Bugallo regresa de nuevo al pabellón de A Cachada para enfrentarse a un Rotogal Boiro en el que se formó como jugador

23 oct 2021 . Actualizado a las 05:00 h.

Nuevo Everest para el Rotogal Boiro en A Cachada. Hoy, a las 19.00 horas, los chicos de Chino Benavídez se enfrentarán a otro histórico del voleibol nacional, un Club Voleibol Teruel que visitará la comarca con una plantilla que cuenta en sus filas con cracs como Pablo Bugallo, Andrés Villena, Thomas Ereu o Aarron Gámez. Frente a ellos, el técnico local espera competir de «igual a igual. Vi los tres partidos que han disputado y cuenta con individuales importantes».

Con todo el equipo disponible, Chino Benavídez reconoció que para poder rendir contra conjuntos de la talla del Teruel deben bajar el porcentaje de errores: «En el encuentro de la pasada jornada vi al equipo jugar por momentos muy bien y fallar mucho en otros. Son cosas que tenemos que corregir lo antes posible».

Sobre las dos derrotas frente a Guaguas y Unicaja Almería, el técnico comentó que «no sé si los resultados son lógicos, pero son justos, porque es lo que marcó el luminoso final. Pero, para mí, lo lógico hubiese sido ganar los tres partidos». Contra el Teruel, el argentino sabe que será clave frenar a jugadores como Greg Petty y el brasileño Jukoski, dos piezas del equipo de Miguel Rivera con una contrastada trayectoria deportiva y llamados a marcar la diferencia.

Contra el cáncer

El encuentro también servirá para recaudar fondos para la lucha contra el cáncer. En colaboración con la junta local de la Asociación Española Contra el Cáncer, el Boiro se ha sumado al Día Mundial contra el Cáncer.

Después de que el Teruel cosechara su primera derrota de la temporada frente al Melilla por 2-3, el Rotogal espera encontrarse a un rival al que lograr hincar el diente. Aunque los visitantes partan a priori como favoritos a llevarse para Aragón los tres puntos, en A Cachada tendrán que decir la última palabra.