Pirotecnias, feriantes y empresas de eventos de Barbanza, contra las cuerdas por el covid

Ana Gerpe Varela
A. Gerpe RIBEIRA / LA VOZ

BOIRO

Pirotecnia Resúa
Pirotecnia Resúa David Costas

Su actividad ha caído un 80 % y algunas firmas todavía tienen a personal en ERTE

25 ago 2021 . Actualizado a las 05:00 h.

El que está a punto de terminar ha vuelto a ser un verano sin fiestas en el área de Barbanza. Julio comenzó bien, con un significativo descenso de casos y una vacunación que avanzaba a buen ritmo. Sin embargo, todo cambió tras las celebraciones de Boiro, cuando apareció la quinta ola y, poco a poco, las citas lúdicas fueron cayéndose de las programaciones comarcales. Las empresas vinculadas a la realización de este tipo de eventos continúan contra las cuerdas, pues mientras otros sectores económicos van recuperando la actividad las suyas siguen bajo mínimos. Pirotecnias, feriantes, firmas de montaje de sonido o alquiler de equipos han visto descender su facturación un 80 o un 90 % y muchas saben que deberán aguardar al próximo verano.

Entre las grandes perjudicadas por la crisis sanitaria figura la pirotecnia Resúa. Uno de sus gerentes, Aurelio Resúa, define la situación como «unha ruína. Estamos subsistindo como podemos. Temos moi poucas vendas, con encargos para botar media ducia de bombas en algunhas festas». Explica que lo habitual era que, en celebraciones grandes de municipios de la comarca, les contratasen fuegos de artificio por importes que oscilaban entre los 12.000 y los 20.000 euros. Este año, los desembolsos no han llegado a los 600. La única excepción es Boiro, que tiene pendientes los que no pudieron hacerse en julio por la lluvia.

El empresario subraya que todavía tienen a cuatro trabajadores en ERTE: «Están dicindo que teremos que collelos de novo en setembro, pero as axudas que tivemos non chegaron a nada».

Por debajo del año pasado

En una situación similar se encuentra la empresa ribeirense Musieventos, que realiza montajes para festivales y conciertos. Uno de sus responsables, Ángel Blanco, señala que «a facturación é ridícula, incluso por debaixo da do ano pasado». Comenta que concellos y entidades han organizado pequeñas actuaciones que les han permitido no quedarse a cero, pero manifiesta que «non é o mesmo mover un equipo de 15.000 euros que un de 300. Por mor do covid pasamos dos sete días de traballo previstos na Festa da Dorna a un, que foi cando se gravou o exame de patróns».

También lo notan firmas de suministros industriales como la boirense Reyca, que tiene entre sus líneas de negocio el alquiler de generadores. Un integrante de la firma, Julián Outeiral, señala: «Notámolo na facturación porque no verán era unha entrada máis. A fin de semana movíamos unha media de oito grupos e agora só algún pequeno para algún pinchadiscos en vodas».

Otros importantes damnificados por las restricciones derivadas de la crisis sanitaria son los dueños de atracciones de ferias, que llevan sin ejercer la actividad desde finales del 2019. Uno de ellos, Juan Balsa, propietario de una pista de autos de choque para adultos, es poco optimista: «Yo ya estoy temiendo el 2022».

«No tiene que haber una fiesta para que podamos montar una atracción, existen formatos alternativos»

Sin trabajar desde diciembre del 2019 lleva el ribeirense Francisco González, presidente de la recién constituida asociación de Empresarios de Atracciones de Feria de Galicia (Emafega). Asegura que su sector «es el gran olvidado» y apunta que «no tiene que haber una fiesta para que podamos montar una atracción, existen formatos alternativos».

La entidad se ha constituido a raíz de la situación creada con la crisis sanitaria y tiene por objeto defender los derechos del colectivo que, subraya, atraviesa por una situación muy difícil. Defiende que «nosotros trabajamos al aire libre y tenemos un protocolo para desarrollar nuestras actividades, pero no nos dejan ponerlo en práctica». González recalca que en otras comunidades está permitiéndose la instalación de atracciones: «En Asturias están trabajando. No entendemos porqué las atracciones no podemos trabajar al 50 %».

Tras 20 meses con cese de actividad, empiezan a abrirse algunas puertas: «Vamos a ir a trabajar a Ponferrada y en Lalín va a permitirse el montaje de atracciones. También en Asturias se está autorizando»,

Asimismo, Francisco González explica que están negociando con el Ayuntamiento de Ribeira para poder instalar algunas atracciones durante el mes de septiembre: «Íbamos a montar algo el primer fin de semana de agosto, pero subieron los casos de covid y quedó anulado. Ahora no sé qué podremos sacar, porque el próximo mes ya no habrá turistas.

Muchos damnificados

La crisis sanitaria está teniendo importantes consecuencias para un buen número de empresas. Las vinculadas a las actividades de ocio en todas sus vertientes, desde orquestas hasta negocios de sonido e iluminación, pasando por las atracciones de feria o puestos ambulantes, han visto reducida su actividad a mínimos. Los efectos de la pandemia todavía tardarán en poder cuantificarse en toda su magnitud, pero el golpe económico que implica esta situación es incuestionable.