Las nuevas zonas azules de Boiro siembran la discordia

María Xosé Blanco Giráldez
m. x. blanco RIBEIRA / LA VOZ

BOIRO

CARMELA QUEIJEIRO

Ante las críticas de vecinos y oposición, el ejecutivo garantiza su legalidad y asegura que buscan evitar multas de tráfico

07 may 2021 . Actualizado a las 05:00 h.

La implantación de zonas azules es una tendencia que, de un tiempo a esta parte, se extiende por los principales cascos urbanos de Barbanza, buscando facilitar el estacionamiento en los puntos clave, eso sí, por un espacio limitado de tiempo. La instauración en Boiro ha sembrado la discordia. Dos cuestiones son las más criticadas por los vecinos y algunos partidos de la oposición: la restricción del aparcamiento a 15 minutos en algunos tramos y la posible ilegalidad en la que podría incurrir el ejecutivo local, por carecer el Concello de una ordenanza municipal que regule esta medida.

En defensa de la decisión de establecer estas zonas azules, desde el gobierno local garantizan su legalidad. En este sentido, el regidor local, José Ramón Romero, explicó que si bien el artículo 93 del Código de Circulación indica que las áreas de aparcamiento limitado serán reguladas por ordenanza municipal, también lo es que el 154 recoge que no obedecer las señales de restricción o prohibición será motivo de sanción, lo que a su entender justificaría las posibles denuncias que se puedan tramitar.

El alcalde apunta que, de tomar como referencia ese artículo 93, también quedarían invalidadas las zonas de carga y descarga: «Funcionan, denúnciase aos infractores e non pasa nada». Y añade que la zona azul no es un invento del actual gobierno: «Xa o PP limitou a dúas horas o estacionamento no aparcamento que está detrás do edificio de Proboin».

Dos franjas horarias

Sobre la duración de los límites fijados, Romero explica que se han establecidos dos modelos teniendo en cuenta el tipo de establecimientos existentes: unos limitado a 15 minutos cerca de librerías o estancos y otro de dos horas en las proximidades de bancos o servicios donde el tiempo de las gestiones puede ser mayor. Está convencido de que la medida no solo mejorará la fluidez del tráfico, sino que reducirá el número de multas: «Impediremos os aparcamentos en dobre fila, enriba das beirarrúas ou nas glorietas, como viña ocorrendo».

En este sentido, y para desmentir el afán recaudatorio que algunos ven en la medida, el regidor ha señalado que, desde el inicio de su mandato, las denuncias relacionadas con cuestiones de tráfico descendieron un 50 %, algo que atribuye a la adopción de medidas como el aumento de las plazas de aparcamiento gratuitas y la instalación de elementos destinados al aparcamiento de bicicletas en las isletas, persuadiendo así a los conductores que estacionaban de forma indebida.

Romero asegura que el diseño de las zonas azules se realizó de acuerdo con la Policía Local y los comerciantes, que ven acertada la medida.