El Rotogal certifica la permanencia y no renuncia a la fase por el título

Francisco Brea
Fran brea RIBEIRA / LA VOZ

BOIRO

CARMELA QUEIJEIRO

Los boirenses fueron muy superiores al Almoradí y cerraron el choque en tres sets

08 mar 2021 . Actualizado a las 22:40 h.

El Rotogal Boiro firmó un gran partido en A Cachada que le sirvió para certificar la permanencia en la Superliga. Los boirenses se deshicieron del Almoradí en tres sets, empleando poco más de una hora. La victoria le permite, además, soñar con disputar la fase por el título, algo que pondría la guinda a una temporada de ensueño.

Los nervios jugaron una mala pasada en el inicio del choque y los visitantes lograron un parcial de 0-5 que ponía en aprietos a los hombres de Emilio Palacio. Pero fue un espejismo, porque llegó la reacción de los barbanzanos para darle la vuelta al electrónico. Del tanteador inicial se pasó a un 11-10 que supuso una ventaja que ya no se perdería. Tras 21 minutos de juego, el primer set y un paso importante para conseguir el objetivo se había alcanzado.

También empezó por debajo en el marcador el Rotogal en el segundo parcial, aunque esta vez la alegría le duró menos al Almoradí. Eso sí, la contienda pareció igualarse hasta que aparecieron Benavídez y Joaquín Gallego para poner tierra de por medio. Con 17-13 en el electrónico los visitantes pidieron un tiempo técnico que les valió para recuperar el pulso al partido.

Por un momento pareció que se le podían complicar las cosas a los barbanzanos, ya que la renta que tenían se esfumó y las fuerzas volvieron a igualarse. En ese instante también le pudo la presión a los valencianos, que tras hacer lo más difícil encadenaron una serie de fallos que no desaprovecharon los locales. Benavídez, que antes había aparecido con su saque cuando más falta le hacía a su equipo, cerró el set.

La fiesta

El objetivo de la permanencia comenzaba a saborearse en A Cachada y nadie quería regalar puntos. Al Rotogal solo le valían los tres y eso se dejó notar en el parqué. Los chicos de Palacio saltaron a la pista dispuestos a no alargar un duelo que parecía visto para sentencia y con Moreno al saque se pusieron 3-0 en el inicio del tercer parcial. Poco a poco la distancia en el marcador fue creciendo y los visitantes iban bajando los brazos.

La celebración se acercaba y el cava se enfriaba en la nevera. El choque lo cerró un saque de Cristóbal Álvarez que el Almoradí no supo defender. En 17 minutos el Boiro había sellado una victoria que supo a gloria. No tardó en desatarse la fiesta sobre el parqué. Los jugadores agradecieron al público el apoyo recibido y el propio Cristóbal Álvarez fue el encargado de descorchar la botella.

Con este triunfo el Rotogal escala a la octava posición y depende de sí mismo para disputar la fase final por el título. La última batalla de la liga regular tendrá A Cachada como escenario de lujo. No será un duelo fácil, porque el rival se juega lo mismo que el Boiro. Será un choque a vida o muerte el que se verá el sábado, a las 18.00 horas. Al otro lado de la red estará el Arenal Emevé.