La Fiscalía pide una pena de nueve años de cárcel para el procesado por atropellar a la víctima intencionadamente
18 dic 2019 . Actualizado a las 19:39 h.La falta de coordinación entre la Policía Nacional y la Guardia Civil sobre a qué cuerpo correspondía el traslado del acusado al juzgado de Santiago desde el ala de psiquiatría del hospital provincial de Pontevedra ha provocado la suspensión de la vista que estaba previsto que se celebrase hoy para juzgar a un vecino de Boiro por intento de homicidio al, presuntamente, atropellar a su excuñado de forma intencionada.
El acusado ingresó en el complejo hospitalario pontevedrés, según informa Efe, el lunes, pero un forense del Instituto de Medicina Legal de Galicia (Imelga) deteminó que estaba en condiciones de declarar, por lo que el juez remitió una orden para su traslado a la sección sexta de la Audiencia Provincial, donde estaba previsto que se celebrase la primera jornada del juicio esta mañana. Sin embargo, la Policía Nacional, que recibió el aviso en primera instancia, delegó en la Guardia Civil argumentando que el traslado era competencia suya. Según explicó el magistrado a los testigos citados para la vista, inicialmente el instituto armado se hizo cargo, pero más tarde se comunicó al juzgado que la responsable era la Policía Nacional. En vista de la situación, el juez aplazó la sesión para mañana a primera hora.
Los hechos que se juzgan ocurrieron en agosto del 2012 cuando, presuntamente, el acusado atropelló a su excuñado cuando este caminaba por un vial de Triñáns, en la parroquia boirense de Abanqueiro. Sostienen la Fiscalía y la acusación particular que lo hizo con intención de matarlo, por lo que solicitan para él una condena de nueve años de cárcel por un delito de homicidio en grado de tentativa.