Los padres de los alumnos decidieron no llevar a sus hijos al colegio y le solicitaron al alcalde de Boiro por aquel entonces que iniciara las gestiones para alquilar otro inmueble
24 sep 2019 . Actualizado a las 05:00 h.El 24 de septiembre de 1987 los niños de Abanqueiro no asistieron a clase. Así lo narraba el cronista de la noticia, quien calificaba las aulas del centro como «tercermundistas». Además, los aseos eran deficientes e, incluso, el suelo estaba encharcado. Por ello, los padres de los alumnos decidieron no llevar a sus hijos al colegio y le solicitaron a Manuel Velo, alcalde de Boiro por aquel entonces, que iniciara las gestiones para alquilar otro inmueble.
El único lugar que parecía apropiado para acoger el aula suponía un gasto mensual de 15.000 pesetas en concepto de alquiler, gastos energéticos a parte. Esta propuesta no fue aceptada en un primer momento en el Concello.
Tras darle varias vueltas, finalmente el alcalde manifestó que aportaría 10.000 pesetas mensuales, y que el resto tendrían que pagarlo los padres de los escolares. Por ello, entendiendo que así se violaba el derecho a una educación gratuita, los alumnos no fueron a clase.
Ante las presiones recibidas, Manuel Velo decidió que la Administración local se haría cargo del alquiler.