Un gran derbi para abrir la liga

Álvaro Sevilla Gómez
Álvaro Sevilla RIBEIRA / LA VOZ

BOIRO

MARCOS CREO

Puebla y Boiro se miden en A Alta 8.918 días después. Dos ideas, filosofías y proyectos diferentes para dar el pistoletazo de salida a la temporada

25 ago 2019 . Actualizado a las 21:13 h.

Han tenido que pasar 8.918 días para que Puebla y Boiro se vean las caras en Preferente. Lo harán hoy, a las 18.00 horas, en un campo de A Alta en el que se espera un lleno hasta la bandera. Dos localidades, dos filosofías, dos proyectos opuestos se enfrentarán sobre el césped pobrense buscando una victoria que marque el pistoletazo de salida a la temporada 2019-2020.

«Ahora empieza lo bueno. Es un partido importante para la afición. Será nuestra primera etapa de las 38 que deberemos completar», afirmó el técnico de los boirenses, un Luis Santiago que es consciente de todos los ojos que estarán puestos en el derbi de esta tarde. Tratando de aliviar la presión, su homólogo pobrense, Anxo Casalderrey, busca quitar hierro al choque: «Son tres puntos. En todas las jornadas tenemos que competir para ganar. El único factor a mayores es que se trata del primer encuentro en casa y queremos dejar un buen sabor de boca a nuestra afición».

Ambas escuadras contarán con bajas. Por parte de los locales, Pap será una de las ausencias aseguradas, mientras que Borja sigue entre algodones. Por los de Barraña, Chiño permanece fuera de la convocatoria después de un problema en el menisco. «Pensábamos que podía ser algo más grave, pero en dos o tres semanas contamos con que vuelva con nosotros», reconoció Santiago. Changui apunta a nueve de referencia de los de Barraña: «Está convocado y veremos si juega. Está claro que un jugador como él tiene que retirarse en el campo de fútbol, no en la grada. Por su trayectoria se merece más que todo eso», destaca el técnico coruñés, que cuenta con el veterano artillero para el reto de este curso.

Filosofías dispares

En A Alta se esperan dos estilos opuestos. El Puebla tratará de aprovechar su velocidad al contragolpe con transiciones rápidas y con una zaga intensa, dura, que no permita el juego entre líneas rival. El Boiro, que estuvo esta semana trabajando una defensa de tres zagueros y dos carrileros, buscará a través del cuero crecer en el partido.

«Conocemos la plantilla que tienen. Es un derbi, pero como si fuera un Atlético de Madrid-Leganés. Sabemos el puesto que ocupamos y saldremos a competir contra un gran club como es el Boiro», reconoció un Casalderrey que otorga la responsabilidad de la victoria a la escuadra visitante. A falta de escasas horas, minutos y segundos para que el balón comience a rodar, pocos partidos pueden ser mejores que un Puebla-Boiro para que la liga dé el pistoletazo de salida.