Polémica y rencor en Barraña

a. parada RIBEIRA / LA VOZ

BOIRO

MARCOS CREO

Tercera El Arenteiro ganó un partido que comenzó inclinándose a favor del Boiro y en el que se vivieron constantes momentos de tensión y numerosas faltas

20 ene 2019 . Actualizado a las 23:42 h.

Ni fue un buen día para el Boiro, ni lo fue para aquellos que se sientan en una grada esperando ver un fútbol digno. Los de Rubén López se dejaron tres puntos en casa (1-3). Lo hicieron ante un Arenteiro que mostró lo mejor de sí en la segunda parte, pero cuya victoria se vio deslucida por el gesto de un antiguo conocido en el campo, un Hugo Sanmartín que tras marcar su segundo golazo se acercó a provocar al graderío boirista y, desde ese momento, desató el cúmulo de polémica y rencor en Barraña que se había ido gestando desde el inicio.

En líneas generales, el encuentro comenzó de cara a los locales, con el frescor de un Álex Ube recién llegado que demostró que lleva pólvora en las botas o los destellos de calidad del binomio de Ángel y Anxo, a pesar de que este se fuese apagando con el transcurso del choque y la presión de unos rivales que se sentían más cómodos en el plano físico.

Todos estos ingredientes se tradujeron, en el minuto 12, en una apertura de la lata con membrete presidencial, por supuesto el de un Changui que recogió un pase en largo de la banda para quedarse solo ante Rui y disparar como en los mejores wéstern, sin perdón. A partir de ese instante, se sembró el malestar, puesto que las gradas reclamaron una falta a favor del Boiro y una bola a la fuga por la banda que los colegiados no entendieron como tales.

Entonces se produjo la respuesta del Arenteiro, en forma de un Hugo que corrió la banda en un abrir y cerrar de ojos para quedarse ante Rodri y pegarla, con la fortuna de un rebote que engañó al cancerbero boirista. El resto de la primera parte estuvo marcada por una doble ocasión de los locales, tras un centro de Ander que no fueron capaces de coordinar en el área.

La provocación

A la vuelta de vestuarios, el Boiro sorprendía con una bella combinada entre Óscar, Ube y Anxo que no halló fortuna en la cocina verde. Cuando el luminoso indicaba el 62, Hugo surgió de la nada para volver a merendarse la banda y fusilar con todas las de la ley, pero se saltó una básica del fútbol al plantarse ante las Krusadas y restregarles el tanto. Así se despertaron viejos fantasmas más relacionados con aspectos administrativos que deportivos y se escuchó alguna advertencia en forma de juego de palabras -«a todo Hugo lle chegará o seu Sanmartín»- entre las pitadas monumentales.

Mas el del lateral no era el único rostro del Arenteiro que sonaba en Barraña y Fajardo recordó el suyo con un disparo que Rodri sacó con una palomita que le puso a la altura de su homólogo rival, que ya atesoraba tres auténticos paradones tirando de puños. López reconfiguró el equipo y apostó por Álex Teira y Xacobe, una decisión acertada que no tuvo tiempo de madurar para darle la vuelta al partido.

No obstante, en los compases finales, una contra del Arenteiro acabaría poniéndole en bandeja a Carlos de Dios el último y definitivo tanto del duelo.

Goles: 0-1, Changui: min 12; 1-1, Hugo: 21; 2-1, Hugo: 62; 3-1, Carlos de Dios: 89

Trío arbitral: Alejandro Ferreiro Méndez, Jorge Méndez López y Ángel Pérez Rodríguez

Incidencias: Municipal de Barraña. Por parte del Boiro, el colegiado sacó cartulinas amarillas a: Anxo, Álex Ube, Paco y a Óscar. Por parte del Arenteiro se las llevaron: Emilio, Ross, Fajardo y Portela

Rodri, Paco, Carlos Romero, Cardeñosa, Borja, Álex Ube (Álex Teira, min 78), Anxo (Xacobe, min 63), Ander, Óscar, Changui y Ángel (Lezcano, min 58)

Rui, Maxi, Padrón, Portela, Cassio, Adil, Rober (Rubio, min 68), Ross (Martín, min 62), Emilio (Carlos de Dios, min 46), Hugo Sanmartín y Fajardo