En pie de guerra contra las falsificaciones

Ana Lorenzo Fernández
ana lorenzo RIBEIRA / LA VOZ

BOIRO

Los comerciantes de Boiro reclaman a las fuerzas del orden un mayor control en los mercadillos y durante las fiestas para evitar la venta de artículos ilegales

13 mar 2018 . Actualizado a las 05:00 h.

No es un problema nuevo en Boiro, pero los comerciantes creen que la situación se ha vuelto insostenible en el último año con la gran proliferación de puestos ambulantes que ponen a la venta productos falsificados en los mercadillos de los martes, así como cuando se celebran otro tipo de festejos. Por este motivo, exigen a las fuerzas del orden que pongan en marcha nuevas medidas de control y de sanción, ya que creen que solo de esta forma se podrá erradicar esta práctica ilegal, «ya que a los que multaron una vez, no volvieron a aparecer por aquí», afirmó el propietario de un comercio.

Óscar España, presidente de la Asociación Boirense de Empresarios (ABE), explicó que es una situación que está ocasionando un grave perjuicio al pequeño comercio local, pero especialmente a las tiendas de moda deportiva. «En las fiestas de verano es una situación descarada, con puestos en toda la calle peatonal con ropa falsificada», destacó, al mismo tiempo que apuntó que varios asociados han criticado «la total permisividad de las autoridades locales sobre la venta de este tipo de productos».

Al mismo tiempo, reconoció que la solución al problema no es fácil, «sino no hubiesen estado más de treinta años para desmantelar el mercado de A Pedra de Vigo. En más, yo creo que deberían ser las propias marcas las que se preocuparan por evitar la venta de falsificaciones, no los pequeños comerciantes».

Limitaciones

Tanto desde el Concello como desde la Policía Local de Boiro reconocieron que es muy difícil controlar esta situación, puesto que no disponen de medios ni están cualificados para presentar las denuncias sobre este tipo de transacciones ilegales. «Nosotros no podemos detectar si una prenda es auténtica o falsificada, si la etiqueta o el logo está bien o mal. No somos especialistas en el tema, y si el vendedor nos presenta una factura de que la ropa que despacha ha sido comprada legalmente no tenemos forma de demostrar que no es cierto», explicaron desde fuentes policiales.

Por su parte, en la Guardia Civil sí disponen de un grupo especializado que se encarga de este tipo de casos, pero los agentes son insuficientes para poder llegar a todos los mercadillos que se realizan en la comunidad.

Según explicaron fuentes del instituto armado, además de realizar controles esporádicos durante todo el año, los miembros de este equipo acuden principalmente a aquellas ferias donde se ha interpuesto una denuncia por la posible venta de prendas y productos falsificados.