Los viveros de empresas ayudaron a despegar a una quincena de firmas

Ana Lorenzo Fernández
ana lorenzo RIBEIRA / LA VOZ

BOIRO

MATALOBOS

A los recintos de A Pobra, O Son y Ribeira se unirán en breve los de Boiro y Rianxo

05 mar 2018 . Actualizado a las 05:00 h.

Los viveros de empresas comenzaron a funcionar de forma tímida en la comarca pero, con el paso del tiempo, han demostrado que son verdaderos centros de despegue de nuevas firmas. Estos espacios de trabajo colaborativo -coworking- ya funcionan a un gran ritmo en Ribeira, A Pobra y Porto do Son, donde han contribuido al impulso de casi una quincena de proyectos en menos de un año.

Las oficinas ribeirenses abrieron sus puertas en marzo del 2017, y por las mismas ya han pasado media decena de emprendedores, cuya actividad es de lo más variada. Así, en los tres despachos que en estos momentos están ocupados desarrollan su labor una firma dedicada a la prestación de servicios musicales, otra sobre asesoramiento en investigación y desarrollo, y otra de organización de citas deportivas. Además, también pudieron disfrutar de los servicios que proporciona este recinto una compañía que estaba especializada en diseño web y márketing digital y otra que realizaba trabajos de traducción.

El espacio colaborativo ribeirense es el más grande de los tres que existen en la comarca hasta el momento, ya que tiene habilitados nueve despachos, mientras que en el del Ayuntamiento de A Pobra -que inició su andadura en el mes de agosto del año pasado- hay un total de ocho, de los que cinco ya están ocupados. Según destacó la concejala de Empleo, Charo Varela, por el momento no hay más solicitudes para entrar en las instalaciones, aunque espera que pronto se puedan llenar todas las oficinas.

La situación contraria se vive en Porto do Son, donde el recinto del vivero de empresas se ha quedado pequeño ante las numerosas peticiones que se han recibido, muchas de las cuales están en lista de espera.

Antonio Romero, concejal de Empleo sonense, reconoció que su intención al llegar al gobierno local fue darle utilidad a un edificio que se había construido previamente, y que solo dispone de tres despachos para que los emprendedores puedan realizar su labor, por lo que habría que realizar varias actuaciones para poder contar con alguno más. «Temos unha empresa de fabricación de táboas de surf que está funcionando moi ben e que ten numerosos encargos», apuntó Romero, que también quiso recordar que estas instalaciones también sirven para celebrar charlas y talleres relacionados con distintas cuestiones laborales.

Este mismo año

Los ayuntamientos de Rianxo y Boiro también están acelerando los pasos para poder contar este mismo año con sendos viveros de empresas. En ambos municipios ya se dispone de inmuebles y de parte de la equipación, por lo que solamente está pendiente de completar la tramitación administrativa para que empiecen a funcionar.

Además de estos espacios de coworking de titularidad municipal, el Centro Integrado de Formación Profesional (CIFP) Coroso también dispone de uno propio dirigido a los estudiantes del instituto o a aquellos que pasaron por las instalaciones educativas ribeirenses en los últimos cuatro años. Según destacó el responsable del servicio, Coke Mariño, hasta el momento solo una empresa dedicada a la producción de algas mostró interés por utilizar este vivero, pero todavía no completó todo el proceso.