La corporación local de Boiro convierte el pleno en un esperpento

Ana Lorenzo Fernández
Ana Lorenzo RIBEIRA / LA VOZ

BOIRO

CARMELA QUEIJEIRO

Cruce de acusaciones entre gobierno y oposición, discusiones fuera de turno y dos abandonos de la sala protagonizaron la sesión

03 feb 2018 . Actualizado a las 05:00 h.

La intención era mejorar el funcionamiento de los sesiones plenarias, que tuvieran una periodicidad mensual, que se publicitaran en la web municipal, que se transmitieran a través de Internet... Todo ello dirigido a que los vecinos de Boiro pudieran hacer un seguimiento del trabajo de la corporación. Sin embargo, lejos de servir como ejemplo de su labor, el pleno de ayer fue un auténtico esperpento en el que, a duras penas, se llegaron a debatir siete puntos en cuatro horas y cuarto, tras las cuales los ediles de IC Boiro se marcharon sin votar el último asunto -que se había discutido durante más de 30 minutos-, y el alcalde, Juan José Dieste, y el socialista Manuel Maneiro se enzarzaron en un enfrentamiento subido de tono que acabó con los ánimos muy caldeados.

Pero, antes de llegar a este punto, el cruce de acusaciones entre gobierno y oposición se había repetido desde la primera moción de un pleno extraordinario cuya convocatoria fue forzada por los concejales de PSOE, Boiro Novo, Ciudadanos e IC Boiro, «que non contaron para nada co BNG», como le echó en cara la nacionalista Raquel Suárez a sus compañeros de banquillo, con los que se evidenció una profunda brecha a lo largo de toda la sesión, situación que aprovechó el PP, que incluso aplaudió algunas de las intervenciones de la portavoz del Bloque.

Periodicidad mensual

El tema a votar -y que no salió adelante- era conseguir que los plenos se celebrasen mensualmente con el objetivo de que así se pudiesen tratar todas las mociones presentadas, «porque algunhas se debaten con máis dun ano de retraso», apuntó Dores Torrado, afirmación que también sostuvo el socialista Luis Ruiz, que consideró que la actual periodicidad «é ineficaz e inapropiada, e é algo que se debe corrixir»; mientras que Javier Chouza afirmó que todo se reducía «a un problema de vontade do señor Dieste».

La intervención de Manuel Velo comenzó haciendo referencia a esta situación, pero luego este tema se diluyó entre viajes a Madrid para pedir la residencia de la tercera edad y la reforma del pazo de Goiáns, los recuerdos de su etapa como alcalde, el cierre del párking de A Negral... Y así hasta acabar denunciando el supuesto comportamiento fascista del regidor, una acusación que estuvo coleando durante toda la sesión, donde fueron constantes las interrupciones fuera de turno del concejal de IC Boiro, algo de lo que también pecaron el regidor, así como el portavoz del PP, Fernando García.

A punto de finalizar la sesión se produjo el momento más surrealista, con un rifirrafe entre Manuel Velo y la concejala de Servizos Sociais, Beatriz Deus, en el que ninguno de los dos estaban en el uso de la palabra, y ni siquiera se había comenzado a debatir ningún punto. La situación llegó a tal extremo que el PSOE y Boiro Novo pidieron al alcalde que interviniera de una vez y pusiera fin a este despropósito.

APROBADO

Publicitar los plenos. La corporación votó a favor de dar mayor publicidad a los plenos a través de la web municipal, donde se colgarán las convocatorias y las actas.

Transmitir por Internet. Hubo unanimidad a la hora de decidir que las sesiones plenarias se puedan seguir a través de Internet.

Intervención de los ediles del equipo de gobierno. El PP votó en contra y el BNG se abstuvo al considerar que no se debe obligar a los ediles a intervenir en un pleno. El resto de partidos de la oposición enmendaron la propuesta cambiando «obligar» por «deber», pero no consiguieron que finalmente se aprobara.

Participación de vecinos. El PP y el BNG (se abstuvo) tumbaron la propuesta porque ya existe un reglamento de participación ciudadana.

Locales para los grupos políticos. Tras la marcha de los ediles de IC Boiro, se aprobó la enmienda del PP que proponía ubicar los locales de los grupos en el centro social de Cabo de Cruz y retirarles la asignación.