La enorme familia de A Covecha ya no cabe en la foto

Marta Gómez Regenjo
M. Gómez RIBEIRA / LA VOZ

A POBRA DO CARAMIÑAL

MARCOS CREO

Los vecinos de A Pobra acudieron puntualmente a una tradición que arrancó hace diez años y que sigue creciendo

26 dic 2019 . Actualizado a las 05:00 h.

Colocar el árbol, las luces y el belén son tradiciones seculares asociadas a la Navidad, pero eso no quita que puedan instaurarse otras nuevas, y eso es precisamente lo que han hecho los vecinos del barrio pobrense de A Covecha. Hace diez años comenzaron a reunirse para hacerse una foto el día de Nochebuena, y desde entonces la enorme familia que forman los residentes no ha parado de crecer. Tanto es así que ya ni caben en la foto.

El martes, como han hecho cada 24 de diciembre durante la última década, los residentes en la zona se citaron en el atrio de la iglesia de O Castelo para la tradicional fotografía. Diez años después de la primera instantánea la evolución es evidente, y muchos de los que se retrataron esta semana ni siquiera habían nacido cuando los propietarios del restaurante A de Rosa impulsaron la iniciativa. Desde entonces han cambiado muchas cosas, pero lo que permanece inalterable es el espíritu navideño de los vecinos.

marcos creo

Cada año la celebración va a más, y en esta ocasión no faltaron ni comida y bebida para todos ni la buena música para ambientar la jornada de fiesta.

Actuaciones musicales

Estaba prevista la actuación de un cuentacuentos que finalmente no pudo acudir a la cita, pero ese detalle no deslució la celebración de la décima edición de la quedada de A Covecha. No en vano, después de la foto, mientras los participantes brindaban por unas buenas fiestas y el año nuevo y degustaban empanadas, sonó la música de la escuela pobrense y de la banda del Ateneo de A Pobra.

Por su puesto, la fiesta no acabó sin que los vecinos quedasen emplazados para una nueva foto el próximo año.