María Abuín, jugadora de rugbi: «Si alguien te coge, siempre hay una compañera dispuesta a sacrificarse por ti»

Francisco Brea
Fran Brea RIBEIRA / LA VOZ

BARBANZA

María Abuín lleva una década jugando al rugbi y destaca el buen ambiente que se respira.
María Abuín lleva una década jugando al rugbi y destaca el buen ambiente que se respira. CARMELA QUEIJEIRO

La pobrense descubrió el deporte por casualidad y se convirtió en una de sus pasiones. Destaca los valores y el compañerismo que hay en este deporte no exento de dificultades

29 abr 2024 . Actualizado a las 05:00 h.

A la pobrense María Abuín siempre le interesó el deporte. «Practicaba disciplinas individuales como la natación y el tenis. También me gustaba el surf y lo intenté, pero lo hacía más por diversión y al final siempre te pedían competir. Yo no me veía, no encontraba la motivación para ello», asegura. Todo eso cambió cuando, ya en su etapa universitaria, descubrió el rugbi: «Fue de estas veces que se te alinean los astros. Tenía una compañera de piso que estudiaba fisioterapia y tenía una amiga que jugaba al rugbi. Nos acabamos conociendo y un día vi que publicaba en redes sociales un vídeo sobre el deporte y le comenté, porque lo vi emocionante».

Así, un simple comentario en redes acabó desembocando en una de sus pasiones. «Las chicas siempre están dispuestas a captar gente porque no hay muchas que quieran jugar», explica Abuín. Por ello, su amiga le animó a que fuese a probar porque había un grupo que jugaba en A Coruña, donde ella estudiaba. «Siempre me había gustado el deporte pero no llegué a encontrar el mío. Este era de contacto, algo que nunca había probado. Fui y lo que vi fue un ambiente genial y valores de inclusión, porque siempre hay un puesto para ti», comenta la pobrense.

En esos momentos, María hacía poco que se había mudado a la ciudad herculina y se sentía sola al estar fuera de casa: «En un principio me quedé por la parte social y luego ya porque el juego es muy divertido». Reconoce que, al principio, «es difícil de entender. A mí se me dio bien porque siempre fui mejor con las manos que con los pies».

El rugbi es un deporte muy popular en muchos países, pero aquí podría considerarse minoritario. «Siempre cuesta presentar equipo y más femenino, porque, como mínimo, hay que ser 23» señala Abuín.

Compañerismo

La barbanzana asegura que «es un deporte de contacto, agresivo porque se usa la fuerza, pero no es violento. Para placar tienes que tener técnica para no hacerte daño ni hacerlo. Si avanzas siempre buscas compañeras, si vas tú sola te inmolas, no ganas metros y eso es lo que se busca. Cuando eres novata siempre hay alguien que te guía, nos apoyamos».

Esa es una de las cosas que más valora la pobrense, el compañerismo: «Si acabas en el suelo, tienes quien te defienda. Si alguien te coge, siempre hay una compañera dispuesta a sacrificarse por ti. Esos valores son muy buenos, más ahora en una sociedad muy individualista».

María Abuín tiene 29 años y comenzó a jugar hace diez. Aunque ya lleva una década, ahora ve como «hay niñas que empiezan a los 12 o 10 años». Es lo que pasa en su equipo, el Pontevedra Rugby Club, en el que milita ya que reside en la ciudad del Lérez.

«Somos de los más nuevos y nuestro objetivo principal era sacar equipo», indica. Pero con esfuerzo y constancia han conseguido mucho más ya que, recientemente, se han proclamado campeonas de liga.

El Pontevedra Rugby Club en Lalín, tras proclamarse campeón de la liga gallega femenina.
El Pontevedra Rugby Club en Lalín, tras proclamarse campeón de la liga gallega femenina.

Fueron cuartas en la fase regular y en el playoff por el título derrotaron al Santiago, que acabó en lo más alto de la tabla, y en la gran final disputada en Lalín al CRAT, que había sido segundo. «A nivel personal, estoy en una nube», señalaba días después de conseguir el título.

La barbanzana asegura que tuvo la oportunidad de «disfrutar con un grupo de amigas y generar un recuerdo que me va a quedar para toda la vida». Porque ella es una apasionada del rugbi y de los valores que transmite, como saber «que tienes un lugar en el que te sientes segura, en el que te apoyan en lo bueno y en lo malo».

Valores y respeto. María Abuín resalta los valores y el respeto, tanto a compañeros como rivales y árbitros, que hay en el rugbi. «Nos partimos la cara y luego nos tomamos una cerveza», bromea, haciendo referencia al famoso tercer tiempo. «El lema de nuestro equipo es que somos una gran familia», comenta la pobrense.