Mario Pérez-Sayáns, el odontólogo que quiere predecir el cáncer analizando la saliva

BARBANZA

El boirense es el investigador principal de una iniciativa que busca detectar la probabilidad de tener un tumor con un análisis de saliva
04 feb 2024 . Actualizado a las 05:00 h.Los amantes de la mitología griega saben perfectamente lo que es una epifanía, un momento de revelación de una verdad absoluta que hasta el momento se encontraba tapada entre las sombras del desconocimiento y, quizás, el subconsciente. Para la gente de a pie, estos episodios son algo más mundano, más cercano a lo experiencial y no tanto a lo divino. Esa sensación de estar descubriendo algo que cambiará el rumbo de una vida para siempre es la que tuvo Mario Pérez-Sayáns cuando siendo tan solo un niño acompañó a su madre al dentista: «Non sei moi ben por que, pero dende aquela sempre tiven claro que quería dedicarme á odontoloxía».
Así comenzó un largo camino de ascenso en el que no faltaron las piedras. Cuenta el barbanzano que en el colegio no empezó a destacar como estudiante hasta que decidió que quería ganarse el respeto de su entorno por su valía y no por lo conocido que fuese entre los alumnos de su año. «Na época de COU foi cando as notas se dispararon», confiesa con una leve sonrisa.
Mientras habla parece no darle demasiada importancia al tema, pero es que su historia llama la atención por la cantidad de premios con los que fue distinguido, pues logró coronarse no solo como el primero de su promoción en el instituto, sino que acabó siendo Premio Extraordinario de la Universidade de Santiago (USC) cuando acabó la carrera.
Superación personal
A continuación le llegaron dos reconocimientos más, ya que también se llevó el oro en galardones de excelencia académica tanto en la categoría autonómica como en la nacional: «Foron momentos moi emocionantes». Cualquiera que echase un vistazo a su currículo podría decir que todo fue una línea recta de ascenso hacia la gloria, mas no fue así.
Lejos de disponer de una buena base económica desde la cuna, el barbanzano tuvo que esforzarse desde el minuto uno en sacar buenas notas para poder pagarse los estudios gracias a las becas.

Piensa que aquellos años duros fueron la mejor escuela que pudo tener, pues aprendió desde muy jovencito eso de «quien algo quiere algo le cuesta». Tan consciente era de su situación que cuando acabó la carrera, lo primero que hizo fue ponerse a trabajar lo antes posible para poder costearse el máster que deseaba hacer: «Gradueime un 5 de xullo e o 9 xa estaba exercendo». En esa época, el también profesor de la USC apostó por combinar empleo, máster y estudios de doctorado. La vida supo premiar el esfuerzo del boirense, que desde hace un par de años lidera el grupo de investigación Oralres.
Esperanza
Una de las líneas del proyecto de ese grupo es el estudio del cáncer oral y de los trastornos potencialmente malignos. En este campo, el barbanzano y sus compañeros también analizan aspectos preventivos, como el perjuicio para la mucosa que suponen los vapeadores, por ejemplo.
Además, trabajan en el desarrollo de métodos de diagnóstico predictivo que ayuden a detectar la posible presencia de un cáncer en el futuro. ¿Cómo quieren determinar esta probabilidad? Pues analizando la saliva de los pacientes. Este avance permitiría saber cuándo una lesión no maligna podría empezar a serlo o incluso conocer las posibilidades de supervivencia de un paciente.
La segunda línea de trabajo de la iniciativa es la de la implantología y cirugía regenerativas, en la que están volcando todos sus esfuerzos para desarrollar un biomaterial degradable que estimule la creación de hueso en pacientes que hayan sufrido algún traumatismo o pérdida después de someterse a un implante. «O obxectivo é devolver a mandíbula ao seu estado natural», explica de manera muy simplificada Pérez-Sayáns.
En esta parte del proyecto colaboran con la empresa gallega Galimplant, que cofinancia la iniciativa con la esperanza de que las investigaciones den como resultado un producto comercializable que supondría una gran innovación a nivel mundial. El tiempo será el que dicte sentencia, pero lo que está claro es que a Mario Pérez-Sayáns le quedan muchos años para demostrar su espíritu de superación.