Adrián Capelo, el arquitecto que trabaja con las comunidades locales de Barbanza de la mano de la Fundación RIA

Celia Riande García
celia riande RIBEIRA / LA VOZ

BARBANZA

Adrian Capelo

Adrián Capelo trabaja en la Fundación RIA, que busca el desarrollo sostenible de Galicia

17 feb 2023 . Actualizado a las 05:00 h.

Adrián Capelo lleva tiempo considerándose un privilegiado, pero no por ello su trayectoria es menos brillante. Comenzó a trabajar en la Fundación Rede Innovación Arousa (RIA), impulsada por David Chipperfield, en 2017, cuando todavía no conformaba una entidad y las vías de acción eran más difusas.

«Empezó esta iniciativa que pretendía contribuir al desarrollo sostenible de Galicia, pero todavía no se sabía en qué dirección iría. Organizaron un taller de estudiantes en el que se trataron cuestiones urbanas, arquitectónicas, de economía, de la producción pesquera y agrícola de la ría de Arousa... y seleccionaron a algunas personas para componer un equipo». Así comenzaría Adrián Capelo su trabajo en la entidad, donde ejerce de coordinador técnico y colabora en la preparación de una nueva edición del proyecto divulgativo Laboratorio Ecosocial do Barbanza, un estudio que busca trabajar con las comunidades locales de la comarca y apoyar iniciativas de manejo sostenible del territorio y que ya cuenta con una primera publicación.

Ampliación del estudio

«Se trata de la segunda parte ampliada del producto de comunicación en el que llevamos trabajando desde el año 2020, junto a la Universidade de Santiago de Compostela y en colaboración con el grupo de investigación Histagra. Contiene los nuevos avances que se han ido produciendo desde entonces», explica el editor de la publicación, quien resume los contenidos como «proyectos que hemos llevado a cabo, iniciativas apoyadas y una descripción de los pasos que queremos llegar a dar en un futuro medianamente próximo».

Aunque se base en el análisis, la obra, que se pretende lanzar en el mes de marzo, va más allá de las palabras, contando con una línea de actuaciones: «Queremos que el libro sirva para comunicar, pero también para que, quienes lo compren, puedan contribuir al proyecto, promoviendo iniciativas como las del 2021, cuando premiamos las acciones de tres comunidades locales de Barbanza. Nos gustaría poder hacer más intervenciones de este estilo y dar apoyo a las comunidades con las que trabajamos asiduamente».

En cuanto a los campos de investigación, esta segunda edición continúa un estudio «ininterrumpido», incluyendo los avances que se produjeron desde entonces: «En el 2020, principalmente, entrevistamos a más de 50 personas, de tres ámbitos de estudio: Brañas de Laíño, la comunidad del monte de Froxán, y la de Baroña. Quisimos coger ámbitos distintos para tener una muestra amplia de tipos de aprovechamiento de territorios. Las Brañas, por ejemplo, estuvo gestionada hasta hace poco de forma comunitaria y tiene una capacidad productiva enorme».

Ronda de entrevistas

Sobre cómo se llevó a cabo este trabajo de campo, Adrián Capelo explica el laborioso proceso de documentación mediante archivos, tanto gallegos como nacionales, que se combinó con las entrevistas: «En su mayor parte hablamos con personas mayores, que habían presenciado y vivido de primera mano todas las transformaciones que se produjeron en la gestión del territorio en el mismo período, desde el 1950».

El coordinador técnico señala además la importancia de estas declaraciones para la obtención de las conclusiones que recoge el libro en diversos artículos: «Nos hablaban de cómo se manejaban las tierras de un modo mas sostenible, daban lecciones de economía circular aprovechando los residuos como fertilizantes, de un tejido social más cohesionado...».

Pese a que el ámbito de análisis se centre en Barbanza, lo cierto es que la publicación se concibe como «un elemento divulgativo que se proyecte también fuera de la comarca», asegura el arquitecto, quien indica que, igual que en el caso de la primera edición, la obra estará editada en gallego, castellano e inglés: «Se hace en tres lenguas porque, a través del grupo de investigación Histagra y del patronato de nuestro presidente, David Chipperfield, tenemos la capacidad de comunicar y difundir los trabajos que realizamos más allá de nuestras fronteras».