El Boiro pierde la oportunidad de ponerse segundo en un partido bronco

Carlos Portolés
Carlos Portolés RIBEIRA / LA VOZ

BARBANZA

Tania Martínez

El O Pino remontó dos goles en contra y sacó un empate

18 dic 2022 . Actualizado a las 19:34 h.

Soñaban los hinchas boirenses con dormir colíderes. Una victoria fuera de casa con el O Pino los habría puesto segundos y habría significado hegemonía barbanzana en los puestos de ascenso directo —el otro está ocupado por el intratable Noia—.

Por desgracia, no pudo ser. Todo comenzó muy de cara. Se adelantó el Boiro por partida doble con dos tantos contundentes. El primero fue una sensacional jugada individual del ariete Pedro Beda, que se sigue demostrando merecedor de portar el dorsal nueve. El segundo fue nada más comenzar el segundo tiempo, y corrió a cargo de Pereira. Se sucedieron los minutos y todo auguraba tranquilidad y alegría para los barbanzanos. Estaban tranquilos hasta que dejaron de estarlo.

La presión de la victoria

La presión de tener tan cerca el triunfo provocó errores que el O Pino aprovechó sin misericordia muy cerca del pitido final. Todo pasó muy rápido. En los minutos 20 y 21 de la segunda parte, los locales marcaron dos goles rápidos que fueron un mazazo para la moral de los de Boiro. En los últimos compases, los nervios pasaron factura a ambos conjuntos, y el partido se acabó abroncando en la recta final. Así, lo que al principio había parecido una segura victoria acabó siendo un amargo empate que, además, terminó con dos expulsados —uno para cada equipo—.

Ahora, el Boiro podría ver peligrar su muy meritoria tercera posición, pues el Mugardos está empatado a puntos y también disfruta de un buen estado de forma. Aunque lo de irse a la cama colíderes no ha podido ser, el equipo no se rinde, y encara el próximo partido en casa contra el Fisterra como si de una final se tratase.