La Virgen del Carmen surcó el mar de Ribeira tras dos años de parón

Adriana quesada / M. G. RIBEIRA / LA VOZ

BARBANZA

La patrona de los pescadores congregó a centenares de fieles en Santa Uxía

07 ago 2022 . Actualizado a las 05:00 h.

La ciudad de Ribeira honró a la Virgen del Carmen como antaño, antes de que una pandemia privase a la patrona del mar de surcar la ría a bordo de un barco. Siguiendo la tradición, la misa en su honor reunió a cientos de fieles, a los que se sumaron también muchos turistas que querían ver a la abogada de los marineros en su día grande.

Desde el inicio de la celebración religiosa previa a la procesión, varios barcos esperaban en el puerto a que la figura de la virgen se asomase por la puerta de la lonja. Mientras tanto, en el interior del recinto de subastas, la ceremonia era amenizada por la música de los gaiteiros de la Asociación Cultural Os Castros, de Ames. Al finalizar, la imagen del Carmen fue llevada a hombros, seguida por la banda, hasta embarcar en el Baleiro Primero. Los vecinos que seguían los pasos de la santa desde el puerto aseguraron que verla a bordo es algo que los emocionó mucho después dos años de restricciones sanitarias a causa del coronavirus.

De generación en generación

Para María José y Patricia Sampedro, dos vecinas de Ribeira, es una tradición de gran importancia. «Llevamos treinta años asistiendo a la procesión, veníamos con nuestra madre», aseguran. Ahora, ellas mismas continúan llevando a sus hijos a esta celebración con la intención de que sea algo que pase de generación en generación.

Destacan como, con el paso del tiempo, el número de ofrendas a la virgen ha ido creciendo. «Hace años era mi madre la única que ponía una en nombre de las familias marineras», asegura María José. Sin embargo, este año ha habido cuatro más, entre ellas una de la tripulación del barco que llevó a la santa en procesión.

Esta celebración tiene un gran peso también para personas como Honorino González, que siendo nativo de Ribeira tuvo que irse a vivir a País Vasco: «Estuve 60 años fuera, pero jamás me he perdido esta procesión». A pesar de vivir a kilómetros de su tierra natal, asegura que esta fiesta «es de mi pueblo y me parece una de las cosas más bonitas que tiene».

Después de la procesión en barco, la Virgen del Carmen fue llevada hasta la iglesia de Santa Uxía, seguida aún por parte de sus fieles. Fue allí donde finalizó la celebración dedicada a la patrona de los marineros, a la que las familias ruegan que proteja a aquellos que se juegan la vida trabajando en el mar.