¿Por qué seguir?

Emilio Sanmamed
Emilio Sanmamed LIJA Y TERCIOPELO

BARBANZA

Zaira Pallas

15 jun 2022 . Actualizado a las 05:00 h.

Juego de tronos fue el sexto libro de George R. R. Martin. Tras el fracaso de su cuarto libro, pensó en dejarlo. Hoy es uno de los autores más vendidos del siglo. En algún momento se tuvo que preguntar: «¿por qué sigo? ¿por qué dedico mi tiempo a esto?» No sé qué conclusiones sacó, pero persistió y lo petó. Desgraciadamente por cada historia como esta hay miles de fracasos.

Puedes tener el talento, la disciplina, la pasión… y eso no garantiza nada. Como George, un día te preguntarás «¿por qué sigo escribiendo?» Yo me lo pregunto a veces, pues ya son muchos años dándole a la tecla sin grandes avances ni grandes estancamientos, como una cáscara de nuez: solo sé de navegar en pequeños charcos. Me quedan tan lejos todos los mares…

Supongo que, pese al esfuerzo, escribir me hace sentir bien. Estoy solo en un cuarto, me pongo música y redacto. En mi infancia quería ser escritor o pintor, dibujaba cómics cada día. Y todavía percibo ese sentimiento infantil de felicidad cuando escribo. Escribo para perseguir esa alegría de niño, porque para mí la literatura está inextricablemente ligada a la felicidad. O a la falta de ella.

La falta de ella me lleva a mis noches en un cuartucho en Madrid, donde bebía y escribía, pretendiendo ser un Bukowski de regional. Tanto escribí y tanto borré esos años que olvidé que la verdadera literatura trata de la felicidad, de preservar y mantener vivo al crío que llevas dentro.

A veces sueño con ese cuartucho en llamas, con todos los poetas dentro, y tu beso antes de irme, por si me llevan preso. Yo escribo para que me quieran.