Congalsa es la primera empresa alimentaria en certificar su sistema de prevención de delitos

No es algo muy conocido a pie de calle, pero las grandes corporaciones cuentan con sistemas de compliance penal, o lo que es lo mismo cumplimiento normativo, que recogen una serie de medidas preventivas que deben adoptar las empresas para evitar la comisión de hechos delictivos o inapropiados en su entorno. La firma pobrense Congalsa cuenta con un programa de este tipo y acaba de ser la primera del sector alimentario estatal en conseguir la certificación acreditada por la Entidad Nacional de Acreditación (ENAC).

Esta certificación se extiende también a Fricosim, empresa integrada en la corporación Congalsa enfocada a la implantación y explotación de industrias frigoríficas, tras haber superado el proceso de auditoría de la entidad Bureau Veritas. Además, el sistema de gestión de la compañía pobrense para prevenir el soborno también ha sido certificado, en su caso conforme a la norma ISO 370001: 2016.

El director general del grupo, Luis Miguel Simarro, recibió ambas acreditaciones de manos de Jacobo de Nóvoa, representante de Bureau Veritas.

Apuesta por la excelencia

Simarro aprovechó el acto para destacar el compromiso de la firma pobrense: «Con estas certificaciones, Congalsa demuestra que sigue apostando por la excelencia en el desarrollo de sus procesos y procedimientos».

Con sus sistemas de compliance penal y antisoborno, Congalsa y Fricosim tratan de establecer buenas prácticas internas de gestión y gobernanza y de tolerancia cero en la comisión de delitos, un compromiso que se plasma en la consecución de ambas acreditaciones oficiales y que tiene como objetivo «seguir siendo empresas líderes en sus respectivos ámbitos de actividad: la alimentación y el frío industrial».

Para superar la auditoría y obtener las certificaciones, la corporación pobrense ha contado con el asesoramiento de la firma Cremades & Calvo Sotelo.

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