Investigada una boirense por envenenar a su perro con matarratas

M. X. B.

BARBANZA

cedida

El animal, de raza potencialmente peligrosa, fue hallado agonizante, atado a un árbol

10 jun 2022 . Actualizado a las 10:50 h.

La patrulla del Servicio de Protección de la Naturaleza (Seprona) de Guardia Civil de Corcubión y la unidad de seguridad ciudadana de Boiro investigaron a una vecina de esta última localidad como autora de un delito de maltrato de animales domésticos. El proceso se inició al recibirse una alerta del posible envenenamiento de un cánido.

 Cuando los agentes se desplazaron al lugar indicado, constataron la presencia de un perro de raza potencialmente peligrosa convulsionando, sin poder mantenerse de pie y atado a un árbol con una cadena sin collar. Al lado del animal había una sartén que hacía de comedero, conteniendo una sustancia granulada de color verde-azulada, que posiblemente se trataría de un producto comercial utilizado para la eliminación de roedores.

La Guardia Civil, ante el estado del perro, indicó a la propietaria la necesidad de llevar al mismo a un centro veterinario para su rápida atención, ya que era factible que se hubiera envenenado ingiriendo el producto reseñado anteriormente, negándose en ella en varias y reiteradas ocasiones a hacerlo. La patrulla del puesto de Boiro trasladó al animal a un centro veterinario de la localidad.

La patrulla del Seprona recogió las muestras del producto que se encontraba en la sartén para su remisión al centro de recuperación de animales salvajes y marinos. Esa misma noche, el perro falleció, emitiendo el veterinario un parte facultativo en el que reseñaba que la causa de la muerte, posiblemente, fuera la ingesta de gran cantidad de tóxico. Una vez recibido el resultado de la analítica por parte del Instituto Toxicológico de la Xunta de Galicia, se confirmó que el veneno hallado en el comedero era el mismo que se encontró en el estómago del cánido.

Las investigaciones llevadas a cabo por La Guardia Civil permitieron averiguar que la propietaria del perro había ido a una protectora de animales para deshacerse de él, tras la negativa de esta entidad, el animal apareció envenenado a los tres días.

Dichos hechos motivaron que la Guardia Civil procediera a la investigación de la dueña del perro como autora de un delito de maltrato de animales domésticos con resultado de muerte.