Moncho Fajardo, el hombre elegante que supo disfrutar la vejez

BARBANZA

RAMÓN FAJARDO BARGO
RAMÓN FAJARDO BARGO

El vecino de Boiro, falleció a los 95 años

23 may 2022 . Actualizado a las 21:12 h.

Su presencia no pasaba desapercibida ni en medio de la muchedumbre que disfrutaba de las verbenas, ni deambulando por la calle peatonal un día como otro cualquiera. Su cabello blanco perfectamente peinado y siempre elegantemente vestido caracterizaban a Ramón Fajardo Bargo, Moncho Fajardo, que falleció el viernes a los 95 años de edad.

La vida de Moncho Fajardo no fue fácil, porque tuvo que superar tres desgracias consecutivas entre 1986 y 1991: el fallecimiento de sus hijos Ponciano y Ramón, en accidentes de tráfico y marítimo, respectivamente, y en medio de las dos desgracias, la muerte de su esposa, Teresa Outeiral, cuando esta solo tenía 58 años. Le quedaron otros dos vástagos: Paco y Marcos —actual concejal socialista en Boiro—, motivos más que suficientes para echarse la vida a la espalda.

Nació en Chancelas, parroquia de Abanqueiro (Boiro), cuna de los Fajardo, pero acabó estableciéndose en Escarabote, adonde, de soltero, acudía pedaleando su bicicleta para estar con su novia Teresa, la mujer de su vida.

La trayectoria profesional de Moncho Fajardo estuvo ligada al mar. Empezó navegando en pesqueros que iban al bacalao en Terranova, ese caladero desgraciadamente conocido por los naufragios y en el que descansan los restos de muchos marineros gallegos. Experimentó los rigores de la pesca a bordo de barcos que nada tienen que ver con los que hoy se emplean en aquellas aguas. En los que faenaba Moncho, eran abiertos, circunstancia que exponía a los marineros a los peligros del frío y los golpes de mar. Pronto encontró acomodo en los gaseros, en los que ejerció de contramaestre hasta que se jubiló a los 55 años.

Una vez cumplidas su responsabilidades laborales, y ya en su Escarabote, ocupó cargos en la ejecutiva de AP de Boiro, y siempre estuvo a disposición de la formación para echar una mano en las elecciones, como apoderado o interventor, continuando con el PP, como se pudo ver en los últimos comicios en una mesa. También se implicó en la directiva del Sporting de Lampón.

Le apasionaba el baile, y para no perderse ninguna oportunidad de disfrutarlo, estaba asociado a los clubes de jubilados de la comarca, a los que acudía impecablemente vestido para poner en práctica sus habilidades, y lo hizo hasta que en diciembre tuvo que ser ingresado al sufrir un bajón en su salud que tuvo su final la madrugada de ayer.

Los restos mortales de Ramón Fajardo saldrán mañana sábado del tanatorio de Boiro, a las 16.30 horas, en dirección a Santiago de Lampón, donde se oficiará el funeral y posterior entierro.