Mientras algunos libreros afirman estar atravesando un buen momento, otros constatan una falta de interés por la lectura que está afectando a las ventas
23 abr 2022 . Actualizado a las 05:05 h.La pandemia, así como la subida de precios, deja opiniones dispares entre los profesionales del sector en este Día del Libro. Hay una parte que se vio afectada negativamente por el confinamiento. Otros aseguran que durante el aislamiento muchas personas decidieron sumergirse en la lectura.
El balance de ventas que hace la responsable de la librería Nobel, Mari Carmen Lijó, no es positivo: «A pandemia tivo como consecuencia que a demanda baixara». La repercusión económica de la caída de las ventas se vio reflejada en las compras de los clientes habituales. La ribeirense argumenta que las personas que antes compraban un libro de 20 euros, «ahora cómpranos de tapa branda ou de peto por 10». Califica el momento que estáa atravesando el sector de «irregular».
La encargada de la librería sonense Andrea, María José Maneiro, lamenta que la cultura de leer «se haya perdido». Su negocio cuenta con dos etapas fuertes: Navidad y verano. «A pesar de haber vivido un año irregular, espero con ganas la llegada de los veraneantes», declara la librera.
Desde el Espacio Lector Nobel, en Boiro, Rosa Tubío cuenta que ella se vio afectada «por ter que estar pechada». Con todo, en el encierro obligatorio «a xente animouse a ler máis, utilizou a lectura para mergullarse nunha aventura, lonxe do que acontecía». Y recuerda que las librerías pequeñas pueden conseguir libros de un día para otro, «non é necesario ir a Amazon».
Con esta idea coinciden la librera noiesa Inma Blanco y el encargado de la pobrense Ler, Cipriano Pose. Ambos aseguran que las librerías «están atravesando por un buen momento». Notan un creciente interés entre los adolescentes de entre 9 y 15 años: «Están empezando a retomar la lectura». La pandemia, cree Pose, tuvo su lado positivo: «Llevó a la gente a cambiar su rutina de vida acercándola de nuevo a la lectura». Resalta la venta de libros de juegos tradicionales, como el ajedrez.
El consumo de libros es diferente en cada concello. FOTo M. creo
Los formatos digitales compiten con el papelTecnología
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Las nuevas tecnologías son las grandes competidoras del papel. La aparición del libro electrónico provocó un miedo generalizado en el sector librero. Pero la realidad no fue tan mala como la pintaban. La trabajadora de Gráficas Sementeira Isa Abeijón recuerda que al principio «falábase de que o dixital suporía o fin do papel». Pero no ha sido así. Desde Carnota, aseguran que hasta el momento «o formato impreso mantense vivo».
La bajada en ventas de libros de papel «foi grande, pero a xente á que lle gusta ler, vaino seguir facendo; penso que tecnoloxía e papel poden convivir». El sector pone el foco en los jóvenes porque «nacen coa tecnoloxía na man», y cree necesario «dar libros desde pequenos».