Pepa Lockhart: La niña de Muros que dio un salto de Goya a la gran pantalla

María Xosé Blanco Giráldez
m. x. blanco RIBEIRA / LA VOZ

BARBANZA

cedida

Se estrenó como dobladora en «Valentina», filme de animación galardonado en el certamen estatal

27 feb 2022 . Actualizado a las 05:00 h.

Tiene solo 13 años, pero su nombre ha sido pronunciado en la gala de entrega de los premios audiovisuales más importantes de España, los Goya. Y es que Pepa Lockhart le pone voz en la gran pantalla a Valentina, el personaje principal de la película que obtuvo la estatuilla en la categoría de filmes de animación. La suya es una historia de esfuerzo y superación personal, marcada actualmente por un capítulo que destaca por la emoción y los aplausos que despierta.

Aunque nació y reside en Santiago, Pepa se siente de Muros, localidad en la que vive parte de su familia y de la que se confiesa una enamorada. Tiene síndrome de Down y fue precisamente a través de la asociación compostelana que presta ayuda al colectivo cómo dio el salto a la gran pantalla. Buscaban un voz para Valentina, una chiquilla con la misma afección que sueña con ser trapecista, y la suya fue la elegida para la versión en castellano de la película.

Aceptó al momento y no dudó en esforzarse al máximo para bordar la interpretación: «Disfrutó muchísimo todo el proceso, pero tengo que reconocer que se esforzó un montón, porque la grabación fue en verano y ella se sentaba delante del ordenador a repetir y repetir», explica su madre, Pilar Caamaño. Reconoce que para ella, un aspecto importante es que fuera la propia Pepa la que tomara las riendas en todo momento: «Ella decidió presentarse a la prueba, aceptar la propuesta y trabajar. Yo me limité a llevarla, traerla y apoyarla».

Recuerdos inolvidables

La propia chiquilla asegura sentirse «superorgullosa» con todo lo que ha ocurrido, pero reconoce que vivió el mejor momento cuando la mencionaron en la gala de entrega de los Goya que tuvo lugar el pasado día 12 y eso que ella no viajó a Valencia, donde tuvo lugar la ceremonia. A ese instante le suma el viaje que hizo a Madrid para asistir al preestreno de Valentina, en el que estuvo acompañada por su mejor amiga, Elena, y por Lucía, la pequeña que le pone voz al personaje protagonista en la versión gallega del filme.

Hasta ese momento, tanto Pepa como sus padres vivieron el proceso relacionado con la película como una experiencia más: «Todo comenzó antes de la pandemia y lo cierto es que nunca fuimos conscientes de la repercusión que podía llegar a tener el filme, lo vimos como una actividad más que a la niña le hacía ilusión. Nuestra familia ni siquiera sabía que había doblado un personaje, se enteraron por los medios de comunicación», comenta Pilar Caamaño.

Esta orgullosa madre no duda a la hora de destacar que, más allá de que el nombre de su pequeña figure en el equipo ganador de un prestigioso Goya, Pepa ha conseguido un premio al esfuerzo y a la perseverancia: «Fue al logopeda desde los 18 meses y, contra todo pronóstico de que acabara hablando con fluidez, ha doblado una película. Para mí, que su trabajo, así como el tiempo y el dinero invertidos, hayan tenido recompensa es lo mejor».

Rompiendo barreras

Pilar Caamaño sabe mejor que nadie que todavía son muchas las barreras a superar para lograr la inclusión plena de las personas con discapacidad, por lo que cada grano de arena que se aporte a la lucha cuenta: «Mi hija está en un momento complicado, en plena adolescencia, y para ella esta experiencia ha supuesto un subidón de adrenalina a la hora de seguir sorteando dificultades».

La propia Pepa reconoce que el cariño recibido de sus compañeros de colegio le gustó especialmente, al tiempo que se mostró feliz de haber subido un peldaño en su lucha particular por la superación. Añade que se sintió muy cómoda poniéndose en la piel de Valentina: «Las dos tenemos cosas en común, pues tenemos síndrome de Down y una abuela maravillosa. Me sentí identificada con ella».

Aunque su madre duda de que el trabajo realizado y el Goya conseguido le abran otras puertas a Pepa en el sector audiovisual, a la pequeña actriz no le importaría repetir la experiencia: «Sí que me gustaría seguir doblando». Salir en los medios de comunicación, recibir felicitaciones, escuchar su nombre por la televisión... sentirse querida y respetada constituyen el gran premio que para ella le ha reportado su participación en la película Valentina.