El Rotogal Boiro arrancará la Copa del Rey contra el rival más difícil

LA VOZ

BARBANZA

Francis Cazorla

Los de A Cachada se enfrentan viernes al líder de la Superliga, el Unicaja de Almería, contra el que cayeron en la competición regular por 3-0

24 feb 2022 . Actualizado a las 18:44 h.

Contra el rival más difícil que le podía tocar, el Unicaja Almería, y necesitado de una gesta que se antoja prácticamente imposible, el Rotogal Boiro afronta su segunda participación en la Copa del Rey. A pesar de que todo se ha conjurado en contra de las aspiraciones del equipo de A Cachada, no hay abatimiento ni brazos bajos en las huestes de Marcelo Chino Benavídez. El técnico argentino confía en que su equipo salte mañana a la pista de Gran Canaria (21.00, hora peninsular) con todo, sabedor de que la presión está toda sobre los hombros del actual líder de la Superliga.

«El equipo llega en óptimas condiciones. El que menos errores tenga en el partido seguramente tendrá mucho ganado», afirma Chino Benavídez, quien ya prepara un duelo contra la mejor plantilla de la competición regular.

Después de caer el pasado curso contra el Guaguas, el encuentro que el Rotogal jugó frente a Unicaja en la primera vuelta de la liga tampoco es un buen precedente para los barbanzanos, que perdieron claramente por un incontestable 3-0.

Los rivales

Como principales contrincantes, los barbanzanos se encontrarán al opuesto Pavel Kukartsev, referente del conjunto andaluz. También con los colocadores Portero y Jovanic, así como con el receptor Javier Jiménez Scull. Juan Manuel González y Miguel Ángel Fornés son otros de los nombres propios del equipo dirigido por Manuel Berenguel.

Después de la victoria contra el CV Teruel por 0-3, el Rotogal llega al duelo copero cargado de moral. Delante tendrá al rival más difícil, pero tras la última gesta sabe que no hay reto imposible. En el caso de volver a hacer historia, los de Benavídez se enfrentarían en semifinales al vencedor del Conectabalear Manacor-Teruel. Un sueño, difícil, pero que nadie va a descartar antes de saltar a la cancha.