El empleo público impulsa más trabajo de personas con discapacidad intelectual

JOEL GÓMEZ SANTIAGO / LA VOZ

BARBANZA

Paco Rodríguez

Fademga insertó 68 el último año en la provincia, 15 en Administraciones

10 ene 2022 . Actualizado a las 05:00 h.

En el año 2011 la Administración del Estado convocó las primeras oposiciones con reserva de plazas específicas para personas con discapacidad intelectual. Hace seis años se sumó también la Xunta. Eso ha impulsado el interés de este colectivo para buscar ocupación laboral. La Federación Galega de Asociacións en favor das Persoas con Discapacidade Intelectual ou do Desenvolvemento (Fademga Plena Inclusión Galicia) preparó a 68 personas de su colectivo que fueron contratadas el último año, y 15 de ellas (el 22 %) en un empleo público. «Esta es la opción que más les interesa ahora, por la estabilidad laboral que supone. Sobre todo tras la pandemia del covid, que tuvo un impacto muy negativo en nuestro colectivo, el más perjudicado de todas las discapacidades», explica Paula Álvarez Fariña, coordinadora de formación de Fademga.

Esta entidad agrupa a 15 asociaciones en la provincia (tres en Santiago, dos en A Coruña, y una en Betanzos, Boiro, Carballo, Cedeira, Cee, Culleredo, Narón, Oleiros, Ortigueira y Rois). Concentra la formación en Santiago, para los municipios del sur; y en A Coruña para el resto. En A Coruña prepararon el último año nueve aprobados en oposiciones (siete funcionarios de la Xunta, un técnico de cuidados auxiliares de enfermería del Sergas y un puesto de personal laboral fijo de ADIF) y seis en Santiago de funcionarios de la Xunta, además de una sustitución temporal. Ahora mismo en Compostela preparan para oposiciones a 145 personas con discapacidad intelectual (110 para ordenanzas, 12 para personal de servicios generales del Sergas y 23 para pinche de cocina del Sergas) y 131 más en A Coruña (102 para ordenanza, 16 para servicios generales y 13 para pinche de cocina del Sergas). Aunque la mayoría de las inserciones laborales en el 2021 fueron en empresas privadas, sobre todo en Santiago, con 47 contratos, y cinco más en A Coruña.

Paula Álvarez resalta que siguen la metodología de empleo con apoyo: cuando una persona que preparan consigue un puesto de trabajo, los primeros días un formador laboral le ayuda para adaptarse. «El problema principal que tienen es el desplazamiento, pues muchos no conducen y el transporte público no siempre se adapta bien a sus horarios», sostiene Paula.