Su nieta, que había perdido la esperanza de que el mensaje llegase, subió la tierna reacción a Twitter
22 oct 2021 . Actualizado a las 22:16 h.Se acercaba el 20 de octubre y Pilar León ya había perdido las esperanzas de que Rafa Nadal felicitase a su abuelo por su noventa cumpleaños. Sin embargo, el regalo llegó, en la forma de un vídeo del tenista que el día 20 José Manuel O Parrallo pudo ver.
La alegría también llegó a las redes, porque su nieta subió a la plataforma social Twitter la tierna reacción del carnotano. En la publicación agradeció la ayuda de los usuarios, que dieron un impulso a su aventura de más de dos meses para conseguir la felicitación de Nadal en una fecha tan señalada. En el vídeo, O Parrallo se muestra visiblemente emocionado ante las palabras de su ídolo.
El camino hasta aquí fue intenso, relata León. «Yo le quería hacer algo especial, algo emotivo. No cualquier cosa que su nieta le pudiera regalar». La joven describe a su abuelo como «muy muy muy forofo de Nadal», y argumenta que la admiración es individualizada, que no es un amor al tenis. En el primer vídeo, en el que pidió a los usuarios ayuda para contactar al tenista, se puede ver precisamente eso, cuando el carnotano habla de su partido contra Djokovic.
En esta odisea también participaron conocidas marcas como Pescanova y canales de televisión, además de cientos de usuarios animando a la familia. «Me sorprendió mucho ver una reacción tan positiva. Normalmente Twitter es un espacio un poco negativo, pero yo solo he recibido comentarios positivos», comentó León.
Lo cierto es que esta vecina de Carnota no pensaba que lo fuera a conseguir. «Mi única opción fue contactar con alguien que conocía al jefe de prensa el día en sí. Que lo hiciera, aunque solo fueran 30 segundos, demuestra la grandísima calidad humana que tiene Rafael Nadal», explicó. A pesar de sus intentos por guardar la sorpresa lo cierto es que la repercusión en medios y redes de esta tierna historia acabó llegando a oídos de O Parrallo, que en los días posteriores apenas se quería mover de casa «por si llamaba Rafa». «La verdad es que yo no puedo estarle más agradecida», recalcó León.