La muradana Pepa Sestayo fue un ejemplo sobresaliente de la audacia de vivir
19 oct 2021 . Actualizado a las 09:09 h.«Puedes llorar, cerrar tu mente, sentir el vacío y dar la espalda, o puedes hacer lo que a ella le gustaría: sonreír, abrir los ojos, amar y seguir». La artista muradana Pepa Sestayo fue un ejemplo sobresaliente de la audacia de vivir.
Comenzamos nuestra andadura allá por el año 2008, cuando nos reunimos con motivo de la celebración de una exposición de pintores muradanos. Te conocimos y nos encontramos con una presencia enfundada en una inmensa alegría. A partir de entonces, no había año que no nos reuniésemos para celebrar una exposición y formamos un grupo, tú grupo. Así inició su andadura el colectivo Croma, del que con tanta energía e ilusión nos hacías participes a todos, donde ya no solo nos sorprendió tu alegría y didáctica, sino tu incansable ilusión por conocer nuevos ámbitos de la cultura y por continuar trabajando en futuras exposiciones. Tenías esa alegría de vivir, locuaz amiga que hizo de la valentía una forma de ser única.
Tus obras, de estilo expresionista figurativo, fueron derivando hacia un inconfundible estilo propio, fruto de una introspección personal, distanciándote progresivamente de la frialdad de otros conceptos realistas. Durante tu larga trayectoria realizaste innumerables exposiciones, tanto individuales como colectivas, en distintas galerías de Galicia: el Hostal de los Reyes Católicos, la muestra Arte na provincia organizado por la Diputación de A Coruña, Espazo e Creación de la Fundación Caixa Galicia, la galería Xerión, la Coarte, la Artbys, la Casa Picasso… trabajando de forma ininterrumpida hasta hace poco. Entre tus últimas exposiciones, la promovida cada verano por el grupo Croma, en Muros, en el pueblo que te vio nacer.
Te gustaba reflejar la alegría de vivir, de la gente sencilla, del campo o del mar. Esa vida que poco a poco te fue dejando, Pepa, cansada ya en esa lucha agotadora.
Los que te conocimos y quisimos nos lamentamos ahora de tu ausencia, sobre todo Docampo, tu marido, y tus hijos, Tatiana y José Manuel.
A ellos y a los demás, que somos muchos, tu marcha nos deja tristes, pero al mismo tiempo con la certeza de haber gozado del privilegio de habernos visto en tu compañía. Grupo Croma de artistas de Muros.