El 20 % de la luz que produce Barbanza bastaría para iluminar toda la comarca

Xoán R. Alvite MAZARICOS / LA VOZ

BARBANZA

ANA GARCIA

El valor de la energía generada sobrepasa ampliamente los 150 millones de euros anuales

02 oct 2021 . Actualizado a las 05:00 h.

Los vecinos del ayuntamiento de Muras, en Lugo, pagan la luz más barata de toda España, mientras que los de Vilar de Canes, en Castellón, podrán tenerla totalmente gratis a partir del próximo año. Alcanzar esa idílica situación ha sido posible gracias a los acuerdos alcanzados con las empresas energéticas asentadas en su territorio -eólicas principalmente- y al compromiso de los gobiernos municipales de repercutir directamente sobre los vecinos los beneficios que estas dejan en el municipio. Un escenario que resulta utópico a día de hoy en Barbanza, pero que no parece descabellado si se tiene en cuenta que la zona se ha convertido ya en una potencia en la producción de energía eléctrica dentro de Galicia. Tanto es así que, en el último año, el valor de la electricidad generada superó los 155 millones de euros, una cantidad infinitamente mayor que el gasto de los escasos 45.000 hogares repartidos por la comarca. De hecho, solo con que un 20 % de lo que se genera se quedase aquí -actualmente la cifra apenas llega al 4 %- ya se compensaría en su totalidad el gasto anual en luz de todas las viviendas.

El cálculo se ha hecho teniendo en cuenta que el consumo medio de un hogar se sitúa, según los datos que maneja el Instituto para la Diversificación y Ahorro de la Energía (IDAE), en unos 3.500 kilovatios hora anuales. Una cantidad que a un precio medio de 20 céntimos -esta semana llegó a sobrepasar los 30- supone un desembolso anual para los vecinos de la comarca próximo a los 30 millones de euros.

«Somos unha potencia pero, na práctica, pouco ou nada do que sae de aquí acaba repercutindo sobre o benestar ou a economía dos veciños, moitos dos cales sufrimos directamente as molestias e perdas que causan, por exemplo, os eólicos. Fíxose mal no seu momento e queren que se perpetúe esta situación na que grandes multinacionais se benefician dos nosos recursos», apuntan desde la asociación Quijote de Outes, una de las convocantes en una protesta para denunciar lo que consideran una invasión de nuevos parques eólicos en el sur de la provincia coruñesa.

A día de hoy, funcionan en la comarca cerca de medio centenar de instalaciones destinadas a la producción de energía eólica. En su mayor parte, una decena, son complejos que cuentan, en conjunto, con casi 400 aerogeneradores y una potencia nominal total de 300 megavatios.

Otras fuentes

A esta cantidad hay que sumarle otros 150 megavatios procedentes de fuentes tan variadas como el aprovechamiento hidroeléctrico, la cogeneración, la fotovoltaica, la biomasa o la que se extrae de las centrales minihidráulicas situadas en ríos como el Xallas y el Santa Baia, en Mazaricos, o el Vilacoba, en Lousame.

En este sentido, tal y como se extrae de los datos publicados por el Instituto Enerxético de Galicia (Inega), más del 90 % de la energía producida en la zona procede de fuentes renovables, es decir, aquellas que son virtualmente inagotables.

La zona multiplicó por siete su capacidad productiva en el último medio siglo

Mucho ha cambiado el potencial productor de electricidad de la comarca desde que en 1927 Unión Fenosa pusiese en marcha el primer complejo energético que funcionó en la zona. De hecho, en el último medio siglo la potencia nominal de las instalaciones existentes en la zona se ha multiplicado por siete, pasando de los 62 megavatios de la central hidráulica que desde 1974 funciona en el tramo noiés del río Tambre a los 450 que suman las existentes en la actualidad.

Algunos de estos centros de producción están promovidos directamente por algunas de las grandes empresas de la zona, que además de involucrase en el negocio eólico, también disponen de plantas de cogeneración, como es el caso de Jealsa o Frinsa. Otras, como JJ Chicolino o Rotogal, han apostado por la energía solar con instalaciones destinadas al autoconsumo que, según los datos que facilita el Instituto Enerxético de Galicia (Inega), cuentan con una potencia total de 100 kilovatios.

Por su parte, el único ejemplo de central de biomasa existente en la zona -el combustible es el biogás- es la que gestiona FCC en la planta de residuos sólidos urbanos de Serra do Barbanza en Lousame.