Barbanza acapara una docena de candidaturas a los premios del Colexio de Arquitectos de Galicia

Marta Gómez Regenjo
M. Gómez RIBEIRA / LA VOZ

BARBANZA

Viviendas particulares, edificios públicos y obras de rehabilitación e interiorismo figuran en la relación de aspirantes a los galardones, que se fallarán el día 25

03 sep 2021 . Actualizado a las 05:00 h.

Barbanza puede presumir, y lo hace, de un rico patrimonio cultural sostenido por numerosos yacimientos arqueológicos y edificios históricos que, en muchos casos, cuentan con la declaración de bienes de interés cultural (BIC). Sin embargo, de un tiempo a esta parte la comarca también está jugando un papel destacado en el ámbito de la arquitectura contemporánea, donde acumula numerosos galardones a los que en unas semanas podrían sumarse hasta una docena de proyectos que figuran entre los candidatos a los Premios COAG, que convoca el Colexio Oficial de Arquitectos de Galicia.

El próximo día 25, en el pazo de Baión, en Vilanova, se dará a conocer el fallo del jurado. Pero, por lo pronto, la comarca cuenta con una amplia representación en la edición número 19 del certamen, con 12 proyectos visados y ejecutados en Barbanza entre agosto del 2018 y septiembre del 2020 que se cuelan en casi todas categorías. Dos viviendas unifamiliares, una en Ribeira y otra en Porto do Son, figuran entre los candidatos en el apartado de construcciones residenciales de nueva planta, obra de Óscar Luis Rodríguez Ramos y Álvaro Marín y Alfonso Castro, respectivamente.

Entre las nuevas edificaciones, en este caso de uso público, también están dos actuaciones ejecutadas en Barbanza: el Museo do Mar de Noia, del noiés Iván Camba, y el centro social de Cornido, en Carnota, que ya recibió una mención en el Premio de Arquitectura e Rehabilitación de Galicia y fue finalista en la pasada edición de la Bienal Española de Arquitectura y Urbanismo.

En este mismo certamen obtuvo un galardón el proyecto de rehabilitación de una casa en Miraflores, en Muros, que ahora opta a los Premios COAG, al igual que una pequeña cuadra reconvertida en vivienda en Mazaricos que también fue finalista en el concurso nacional.

Más categorías

En el listado también figura una obra que en su día generó polémica y que finalmente ha recibido diversos reconocimientos. Se trata de la rampa de acceso a la iglesia de San Martiño de Noia, que figura entre las candidaturas de la categoría de arquitectura efímera.

Otro apartado que también cuenta con representación barbanzana es el de interiorismo, donde figuran los proyectos realizados por Estudio Puntocero para una peluquería y una clínica dental en Boiro; mientras que Laura Fernández y Alicia Casanova optan al premio fin de carrera por sendos trabajos relacionados con la actividad pecuaria en la sierra de Barbanza.