Algunos negocios se resisten, pero otros ven en Internet un escaparate para dar salida a sus fondos
23 abr 2021 . Actualizado a las 05:00 h.Tras un año en suspenso por la pandemia hay ganas del Día del Libro, y quienes recurren a sus establecimientos de referencia de forma regular a lo largo del año o quienes no dejan de celebrar el 23 de abril con una visita a la librería seguro que no faltarán a la cita. Sin embargo, las grandes plataformas de distribución online están ganando terreno en las ventas, y frente a eso, los pequeños negocios de Barbanza están comenzando a encontrar en Internet un aliado, y en las redes sociales, un escaparate para dar a conocer todo lo que tienen que ofrecer.
Cierto es que el salto digital es todavía escaso y hay a quien le cuesta dar el paso, como Cipriano Pose, de la librería Ler, que pese a ello reconoce que el futuro va por esos derroteros: «Hoxe en día imponse e non podemos ir contra as tormentas. Particularmente resístome, pero acabarei por asumilo. Vistas as circunstancias, sobre todo a raíz da pandemia, non podemos encorsetar o fondo editorial, temos que dar facilidades para adquirir libros». Pese a la resistencia a la que alude, Pose sí utiliza redes sociales como Facebook para dar a conocer novedades, ofertas o hablar de algún título concreto.
Al igual que en otro tipo de comercios, estas plataformas se están mostrando útiles para promocionar y comercializar los fondos editoriales de las pequeñas librerías. Ese es el caso, al menos, de la librería Blanco, cuya responsable, Inmaculada Blanco, asegura estar contenta con el resultado de su apuesta por las redes sociales, aunque suponga un esfuerzo extra.
Recompensa
«Costa, porque as publicacións coas fotos e os comentarios fágoas eu, e non se trata só diso, tamén hai que facer un seguimento e estar pendente para contestar o antes posible se alguén escribe algo», explica Blanco, que, pese a ello, está satisfecha: «As redes sociais valen para todo, e desde que teño Facebook noto que a venda de libros subiu. Estou contenta, porque ademais ves que o traballo que fas ten recompensa». En su caso, intenta colgar todas las novedades que recibe porque reconoce que es un buen escaparate del que no dispone en la tienda física. Y, en contra de lo que se podría pensar, de esta manera llega a todo tipo de públicos: «Hai persoas de 70 anos que tamén teñen redes sociais, unha señora contactoume para saber se tiña o último libro de María Dueñas, que é o que máis se está vendendo estes días».
Sira, el nuevo título de Dueñas, figura también entre las numerosas novedades destacadas de la librería noiesa Sementeira: «Como o ano pasado non houbo Día do Libro en abril, este mes sacaron moitas novidades: o último libro de Javier del Castillo, de Elísabet Benavent, o de Manuel Gago, ou o Premio Xerais, que tamén saíu agora. E xa de cara ao 17 de maio estase vendendo moi ben a obra de Xela Arias».
En el negocio apuntan que «somos da vella escola» y, de momento, no se han asomado a las redes sociales, sin embargo, para Rosa Tubío, de la librería Nobel de Boiro, son una herramienta más: «Non hai moito tempo que temos perfil en Facebook e Instagram, pero é útil para publicitar libros e actividades. A xente ponse en contacto, preguntando se temos algún título concreto e facemos envíos. O outro día fixemos unha venda ao País Vasco dunha obra que non atopaban en ningún outro sitio».
Rosa Tubío reconoce que las redes son una herramienta más para darse a conocer FOTO