Barbanza marca el contrapunto en la violencia de género

Ana Lorenzo Fernández
ana lorenzo RIBEIRA / LA VOZ

BARBANZA

CARMELA QUEIJEIRO

Las denuncias por esta causa aumentaron un 30 % en el 2020 en la comarca, mientras que en Galicia la tendencia fue a la baja

18 mar 2021 . Actualizado a las 05:00 h.

Si la violencia de género ya era una lacra en la comarca, donde caminaba sin control, el coronavirus ha venido a complicar todavía más la situación. Según el informe que acaba de hacer público el Consejo General del Poder Judicial (CGPJ), durante el año 2020 -marcado por la irrupción de la pandemia- las denuncias por esta causa se incrementaron un 30 % en Barbanza, en concreto, se pasó de 324 a 465 nuevos expedientes.

En la sede de los juzgados de la capital barbanzana fue donde se contabilizó el mayor número de causas por este motivo (268), 73 más que en el anterior ejercicio. Sin embargo, el aumento más significativo tuvo lugar en Noia, donde las denuncias se multiplicaron por dos, pasando de 88 en el año 2019 a 168 en el 2020. El contrapunto a esta situación lo marca el partido judicial de Muros, donde la situación fue la contraria y la cifra de expedientes por esta causa disminuyó, cayendo de 41 a 29.

Como ya viene ocurriendo en los últimos años, la mayoría de los casos de violencia machista llegan a los juzgados a través de atestados policiales en los que los malos tratos suelen ser el motivo que lleva a denunciar al presunto agresor. Así, de los 268 ingresados en Ribeira, 170 fueron por este motivo, mientras que en Noia la cifra ascendió a 65 y en Muros a 23. En este último partido judicial hay que señalar que fue donde se registró uno de los casos más graves, puesto que se ocasionaron lesiones al feto de la denunciante.

Nivel de resolución

Otro aspecto muy significativo es que, aunque siempre se acusa a la Justicia de ser muy lenta, el año pasado el nivel de resolución de casos de violencia de género fue relativamente elevado. De hecho, en Ribeira apenas quedaron 18 expedientes abiertos al finalizar el 2020, mientras que en Noia acabaron el ejercicio con un total de 33 pendientes y en Muros cerraron el año con todos finiquitados.

Este incremento de denuncias en el área de Barbanza durante la pandemia contradice a lo ocurrido en el conjunto de la comunidad gallega, donde la tendencia fue a la baja, con una disminución de un 7 % -de las 6.551 se bajó a 6.097-. Según el informe del CGPJ durante los meses de confinamiento en Galicia se frenó la llegada de demandas por este tipo, y eso que los juzgados especializados en violencia sobre la mujer continuaron funcionando porque se considera actividad esencial.

«El confinamiento generó muchos conflictos y roces en las parejas»

El abogado Manuel Blanco Ons estaba convencido de que las cifras de denuncias por violencia machista se dispararían durante la pandemia, «porque la obligatoriedad de estar en casa durante el confinamiento generó muchos conflictos y roces en las parejas». Lo que no sabe explicar es por qué en Barbanza aumentaron significativamente y en resto de Galicia bajaron, «porque mi impresión era que crecerían en toda la comunidad».

Explica que la mayoría de estos casos tienen que ver más con la violencia verbal que con la física contra las mujeres. «Suelen ser actos de desprecio, de falta de sensibilidad y comportamientos machistas. De los últimas siete denuncias que he llevado, cinco son exclusivamente de violencia verbal contra la mujer», destacó Blanco Ons.