El L?Etel cumple un año hundido en Ribeira

Marta Gómez Regenjo
Marta Gómez RIBEIRA / LA VOZ

BARBANZA

CARMELA QUEIJEIRO

Doce meses después de que el palangrero se fuera a pique, Portos acaba de sacar a licitación las tareas para reflotarlo por un importe de 482.000 euros

29 ene 2021 . Actualizado a las 05:00 h.

Una boya señala su localización pero, por lo demás, en el puerto de Ribeira no queda rastro del L’Etel, un viejo palangrero que hace justo un año se fue a pique en la dársena y desde entonces está sumergido en las frías aguas ribeirenses a la espera de que se solvente la compleja tramitación administrativa para su retirada. Estos 12 meses han sido una crónica de aplazamientos en una maraña burocrática que, poco a poco, se va desembarazando. No en vano, Portos de Galicia acaba de sacar a licitación los trabajos para reflotar y retirar el barco de la rada de Santa Uxía.

Para llegar hasta aquí han tenido que pasar muchos meses en los que parecía que nada se movía para que el L’Etel emergiera, y eso que a principios del 2020, cuando se fue al fondo debido al fuerte viento que sopló en aquellos días y a los años de abandono que acumulaba el casco, había mucha prisa por sacarlo del puerto, entre otras razones por el peligro que suponía para el tráfico marítimo. Ni siquiera el propio patrón mayor de Ribeira, que ya antes del hundimiento había reclamado en reiteradas ocasiones que tanto el L’Etel como el Eros Dos, otro barco abandonado, fueran retirados de la dársena, tiene muy claros los pasos que se han dado para solventar el trámite.

«Estaban para adxudicar os traballos cando comezou a pandemia e quedou todo parado. Tampouco estaba moi claro se ían sacalo enteiro do fondo ou se o ían despezar e sacalo a cachos», indicaba José Antonio Pérez unos días antes de cumplirse un año del hundimiento.

Y es que sacarlo a flote para luego remolcar los 35 metros de eslora de la embarcación no será una tarea sencilla, ni barata. Para hacer emerger el palangrero será necesario, entre otras cosas, contar con grúas de grandes dimensiones, y no abundan las empresas especializadas con capacidad para llevar a cabo esta tarea.

A ello se suman las dificultades administrativas y los largos trámites que hubo que solventar y que han retrasado la contratación de los trabajos para retirar el buque. El pasado verano, la Administración autonómica situaba en el último trimestre del año la licitación, un plazo que se ha extendido algunas semanas más.

Casi medio millón

Este mismo lunes se publicaba el anuncio para contratar los servicios de reflotamiento y gestión de los restos del L’Etel, una actuación que cuenta con un presupuesto de casi medio millón de euros. En concreto, el importe de licitación es de 482.366 euros, y las empresas interesadas en participar en el procedimiento tienen hasta el 23 de febrero para presentar sus ofertas.

Luego habrá que analizar las propuestas, adjudicar los trabajos provisionalmente, abrir un plazo de alegaciones, la adjudicación definitiva y la firma del contrato, con lo que, posiblemente, el palangrero continuará en el fondo de la dársena de Ribeira, como mínimo, hasta primavera.

Así pues, parece inevitable que el L’Etel siga algunos meses más sumergido. Al menos, el proceso iniciado para reflotarlo ha servido para que el puerto de Ribeira se librara de otro barco fantasma que acumulaba años de abandono y una historia de vandalismo y okupación, el Eros Dos, que a principios de septiembre fue remolcado y abandonó la dársena definitivamente tras más de una década amarrado en el muelle de la capital barbanzana.

Una trayectoria de avatares para una embarcación construida a finales de los años 60

La travesía del L’Etel comenzó en 1967, fecha en la que el palangrero salió de unos astilleros de La Rochelle e inició una trayectoria llena de avatares hasta su hundimiento en aguas del puerto de Ribeira el 22 de enero del 2020.

2009

Llegada a Ribeira. Hace más de una década que el L’Etel arribó a Santa Uxía, de donde ya no se iría nunca. No pasó mucho tiempo hasta que se quedó sin actividad y abandonado, lo que propició incidentes, como un incendio registrado en el 2012.

2018

Subasta. Después de un largo período de inactividad y sin que nadie abonase las cuotas correspondientes por el atraque, Portos inició el proceso para declararlo en situación de abandono y en el 2018 fue vendido mediante subasta pública junto al Eros Dos.

2020

Hundimiento. Tras la subasta, ambos buques deberían haber emprendido el camino hacia el desguace a principios del 2019, pero el adjudicatario solicitó varios aplazamientos y en enero del año pasado el L’Etel se hundió.

2020

Septiembre. El Eros Dos abandonaba definitivamente Ribeira hace cuatro meses, mientras su compañero de amarre espera su turno en el fondo del mar.